Mérida, Yucatán- “Uno de los objetivos fundamentales de la Estrategia Escudo Yucatán es fortalecer la confianza de los ciudadanos en sus autoridades para arraigar más la cultura de la denuncia y en consecuencia se pueda reducir significativamente la llamada “cifra negra” de delitos no denunciados”, afirmó el secretario general de Gobierno, Roberto Rodríguez Asaf.
El responsable de coordinar las políticas internas de seguridad en Yucatán explicó que el término identifica el porcentaje de delitos que permanecen sin ser denunciados, ya sea por causas atribuibles a la autoridad o por otras diversas”.
“A nivel nacional, según la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) realizada por el INEGI, la “cifra negra” a nivel nacional rondó el 93.6%; es decir, que del total de actos delictivos que ocurrieron en 2016, únicamente fueron denunciados 9.7% y de esta cifra, se inició averiguación previa o carpeta de investigación en el 65.2% de los casos”, idicó.
En Yucatán, dijo, los delitos no denunciados en 2016 se estimaron en un porcentaje del 91.3%.
“Aunque esta cifra es un poco más de dos puntos porcentuales menos que la media nacional, definitivamente es necesario intensificar acciones para abatirla, para fortalecer la cultura de la denuncia, que es la que nos lleva a iniciar las averiguaciones y a combatir el delito”, comentó.
Rodríguez Asaf explicó que las causas más frecuentes por las cuales no se denuncian los delitos, según la propia ENVIPE, son: “pérdida de tiempo” (26.4%) y “delitos de poca importancia” (20%).
“Por eso es tan importante que todos tengamos bien presente que denunciar es el primer paso en la cadena de procuración de justicia, y al igual es relevante para la autoridad que los cuerpos policiales sean eficientes y estén libres de dudas ante la ciudadanía. Mientras más confía la gente en sus policías, más denuncia los actos delictivos y más se trabaja en combatir estas acciones negativas”, señaló.
En este sentido, observó, un instrumento relevante es el número 9-1-1, que la ciudadanía puede utilizar responsablemente para denunciar actos presuntamente delictivos. Con una llamada, es posible alertar a las corporaciones de seguridad y tener una reacción oportuna.
“Seguimos trabajando todos los días para responder a la ciudadanía con eficacia y rapidez, y sobre todo para ser siempre merecedores de la confianza, base de la cultura de la denuncia”, concluyó.