Brittany K. Barnett y MiAngel Cody son dos abogadas con un propósito, conseguir la excarcelación de personas con condenas que creen injustamente largas al tiempo que pelean por una reforma penal. Su campaña alcanzó otra dimensión insospechada cuando recibió el apoyo de la socialité Kim Kardashian.
Brittany K. Barnett trabaja en Dallas con el Proyecto Enterrados Vivos (Burried Alive Project) y MiAngel Cody es una de las fundadoras del Colectivo de la Excarcelación (The Decarceration Collective) de Chicago.
“Siempre me interesó cómo los tribunales y los jueces consideran los dramas humanos que tienen frente a sí, que es lo que me hace cuestionar las sentencias mínimas obligatorias. Porque cuando tienes sentencias mínimas obligatorias, los jueces no pueden tomar en cuenta las historias individuales de la gente”, comentó MiAngel Cody a la Associated Press.
Kim Kardashian, quien estudia derecho al tiempo que maneja sus negocios de cosméticos y su programa de reality TV, se enteró del trabajo de Brittany K. Barnett al ver una entrevista con Alice Marie Johnson desde la cárcel. Buscó a los abogados de esa abuela y fue así que la conoció.
El presidente Donald Trump conmutó la condena a cadena perpetua obligatoria que se impuso a Alice Marie Johnson por venta de cocaína después de recibir a Kim Kardashian en la Casa Blanca. Trump estampó su firma en una reforma penal bipartidista aprobada a fines del año pasado. Luego de eso, las abogadas Barnett y Cody unieron fuerzas y lanzaron una campaña para conseguir la excarcelación de tanta gente como fuese posible al amparo de las nuevas normas.