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Propietaria de la “Funeraria Garrido” / Fue sorprendida en su domicilio del Centro por dos sujetos, quienes la amagaron y amarraron de pies y manos / Se llevaron más dos millones de pesos
Una anciana de 92 años de edad, propietaria de la “Funeraria Garrido”, fue víctima de un par de asaltantes que allanaron su casa del Centro de la ciudad, ayer por la mañana, aprovechándose de su avanzada edad y que se encontraba sola, llevándose los delincuentes un botín de aproximadamente dos millones de pesos.
La nonagenaria mujer no sufrió daño alguno a pesar de que fue amarrada de pies y manos por los malandrines, quienes la convencieron para que les abra la puerta y una vez que la señora lo hizo entraron y la sometieron.
El robo sucedió poco antes de las once de la mañana de ayer, en el predio marcado con el número 568 de la calle 50 entre 73 y 73-A del Centro de la ciudad. Se guardó hermetismo en cuanto al nombre de la mujer, pero se pudo averiguar que es la propietaria de la “Funeraria Garrido”, ubicada sobre la calle 50 entre 71 y 73, muy cerca de donde vive la señora y a quien le prestaron ayuda empleados de un negocio que se ubica enfrente de su domicilio.
Los delincuentes, con todo el tiempo del mundo, revisaron toda la casa y los muebles en busca de dinero y objetos de valor, por lo que abrieron roperos, cómodas, vitrinas y cajones; como dirían algunos: pusieron la casa de cabeza, logrando llevarse un botín de alrededor de dos millones de pesos, entre dinero en efectivo y joyas, pero antes de retirarse amenazaron a la mujer con matarla si los denunciaba.
Luego los cacos emprendieron la huida con rumbo desconocido. Hasta el momento y debido a las investigaciones del caso no se ha informado del número de delincuentes que participaron en el atraco, aunque se presume fueron dos sujetos, quienes aparentemente habían trabajado con la mujer, pues sabían su rutina.
La mujer, como pudo, logró abrir una ventana de la casa que da a la calle y pidió ayuda a gritos, por lo que empleados de un negocio de enfrente procedieron a auxiliarla y dar parte a la policía, en poco tiempo el sitio se llenó de unidades de la Secretaría de Seguridad Pública, cuyos elementos realizaron un operativo en busca de los ladrones, basados en los generales que proporcionó la mujer.
Los uniformados empezaron la búsqueda de los delincuentes por la zona, en la terminal de autobuses, y además fueron colocados retenes a las salidas de la ciudad. Familiares de la señora también arribaron a la céntrica casa, donde los agentes ministeriales procedieron a tomarles sus declaraciones con total hermetismo en torno al caso.
Trascendió que uno de los delincuentes fue detenido, pero el botín no fue recuperado, por lo que se presume que su cómplice huyó con éste. Información PorEsto
