La NASA desmintió los rumores acerca de que el asteroide 2007 FT3 impactaría a la Tierra este 3 de octubre.
La NASA señaló que este 3 de octubre, el asteroide 2007 FT3 pasará a 138 millones de kilómetros de la Tierra, una distancia tan grande que ni siquiera podrá detectarse con los telescopios de los observatorios.
En otras palabras, este asteroide se ubicará a 360 veces la distancia que separa a nuestro planeta de la Luna, por lo que no representa ningún riesgo.
Descubierto el 20 de marzo de 2007, este asteroide tiene un diámetro de 340 metros, por lo que, de estrellarse con nuestro planeta, provocaría un daño considerable.
Tras ser descubierto en Mount Lemmon, Arizona, el asteroide 2007 FT3 se escondió en el espacio y los astrónomos le perdieron el rastro. Por ello, su órbita generó incertidumbre y se le mantuvo en la lista de riesgos del Centro de Estudios de Objetos Cercanos del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA.
El 11 de octubre de 2068 el asteroide 2007 FT3 pasará más cerca de la Tierra, a 24.5 millones de kilómetros. No obstante, esa distancia seguirá siendo segura.
Polvo de un asteroide pudo haber causado un enfriamiento global
El 18 de septiembre de este 2019, la revista Science Advances informó que hace unos 466 millones de años, el polvo en la atmósfera proveniente de la colisión de un asteroide pudo haber causado un enfriamiento global del planeta, que desencadenó una edad de hielo.
Mucho antes de la aparición de los dinosaurios, la Tierra se heló, los mares empezaron a congelarse en los polos y las nuevas temperaturas desencadenaron la evolución de nuevas especies.
En la actualidad, siempre hay polvo de asteroides y cometas procedente del espacio que flota hacia la Tierra, pero supone solo una fracción minúscula respecto a partículas similares, como la ceniza volcánica y el polvo de la arena del desierto o de la sal del mar.
Sin embargo, cuando un asteroide de unos 150 kilómetros de ancho se hizo pedazos entre Marte y Júpiter hace 466 millones de años creó más polvo del habitual.
Normalmente, la Tierra gana unas 40.000 toneladas de material extraterrestre cada año”, dijo el profesor asociado de la Universidad de Chicago (Estados Unidos) Philipp Heck, uno de los autores del estudio.
Imagínense multiplicar eso por un factor de mil o diez mil”, agregó el científico.
Para hacerse una idea de lo que esto supone, en un año normal el equivalente a mil camiones con polvo interplanetario caen a la Tierra, mientras que dos millones de años después de la fractura del asteroide esa cantidad pudo corresponderse con 10.000 vehículos de ese tipo.
Nuestra hipótesis es que las enormes cantidades de polvo extraterrestre en un tiempo de al menos dos millones de años desempeñaron un papel importante en el cambio del clima en la Tierra, contribuyendo a su enfriamiento”, dijo Heck.
Con información de Milenio y EFE