Brown no especificó el número de tropas que serán desplegadas en la frontera.
El lunes, el director adjunto de los servicios de aduana y protección de fronteras, Ronald Vitiello, dijo que el gobernador de California se había echado atrás y se había negado a participar en el despliegue por considerar “intolerable” el plan.
Según el funcionario, la Guardia Nacional y los departamentos de Seguridad Interior y Defensa enviaron al gobernador una propuesta detallada en la que le solicitaban el despliegue de 237 militares en dos grandes puestos fronterizos para desarrollar funciones administrativas y de ayuda a las operaciones que necesitaran equipamiento pesado. Pero Brown se negó a satisfacer la demanda.
En el comunicado de este miércoles, el gobernador precisó que la misión de sus soldados estará enfocada en el combate de pandillas, el tráfico de armas, drogas y personas, y no en ejecutar la ley migratoria o en la construcción del muro prometido por Trump.
California se proclamó en octubre pasado como estado “santuario”, en el que las policías locales no colaboran con las autoridades federales en el arresto de inmigrantes ilegales. Sus leyes proinmigrantes fueron demandadas en la justicia por el Gobierno de Trump.
Hace una semana Brown anunció el despliegue de 400 soldados para unirse a los 250 ya movilizados en el estado, 50 de ellos en la frontera, pero el lunes se negó a cumplir su anuncio.
Evan Westrup, portavoz de Brown, explicó que entonces “se llegó a un acuerdo con el Gobierno Federal para pagar por los efectivos y los costos de la operación”.
El martes, Trump criticó a Brown por “no buscar la seguridad en la muy porosa frontera”, pero el gobernador indicó al poco tiempo que había un acuerdo.
“Queremos ser cooperativos y creo que llegamos a un acuerdo común”, dijo Brown en una rueda de prensa. Información Noticieros Televisa