Asimismo, la propuesta impulsada por el Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y Movimiento Ciudadano (MC) y el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), busca modificar el Código Penal de México para sancionar con penas de cárcel dichas terapias.
De la misma manera, se pretende modificar la Ley General de Salud para castigar, con la suspensión del ejercicio profesional, a los médicos que promuevan o apliquen dichas prácticas que atentan contra la integridad y derechos de las personas no heterosexuales.
“No podemos normalizar que estas terapias de conversión sean legales porque implican torturas y violaciones graves a los derechos de las personas”, aseveró Citlalli Hernández, senadora de Morena, acompañada de otras legisladoras y representantes de la comunidad lésbico, gay, bisexual y transexual (LGBT) en rueda de prensa.
En el mismo tenor, Patricia Mercado, senadora del Movimiento Ciudadano, recordó que Naciones Unidas retiró en los años 90 la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales y defendió erradicar esas supuestas terapias por ser “una práctica dolorosa y cruel”.
Por su lado, Iván Tagle, director de la organización YAAJ, argumentó que “esta iniciativa es un rayo de esperanza para todos los jóvenes que están ahora en sus casas con miedo, siendo violentados y quizás en una terapia de conversión”.
Agregó que “es una oportunidad para que el Gobierno esté en el lado correcto de la historia”.
Cabe mencionar, las tres formaciones políticas que apoyan la iniciativa tienen mayoría en la Cámara Alta, por lo que confiaron que el trámite siga adelante y la iniciativa sea aprobada.
Con información de EFE y Sin Embargo