Felícitas Muñoz viajó desde su comunidad, a poco más de una hora de Acapulco, Guerrero, para recibir el cuerpo de su hijo Fortino Roque Muñoz, de 36 años de edad, uno de los 28 reos que murieron durante la riña en el penal de Las Cruces.
Afuera del penal, 200 mujeres estuvieron a la espera de la reanudación de visitas.
Según las primeras investigaciones de la Fiscalía estatal, los responsables de la riña son reos integrantes del Cártel Independiente de Acapulco.
Héctor Astudillo, gobernador de Guerrero, señaló que la riña fue planeada por quienes la hicieron, “ubicamos perfectamente quienes lo hicieron”.
El director del penal fue destituido y puesto a disposición de las autoridades, junto con tres custodios y un grupo de internos, también se confirmó que en el enfrentamiento se utilizó una pistola calibre 38.
“La mayoría de las muertes se ocasionaron por armas punzocortantes y también por palos y por piedra y hubo un arma de fuego, de acuerdo a la información de la investigación”, detalló el gobernador.
Sobre el pase de lista que hizo el vicefiscal de Prevención, Néstor Fiallo, el gobernador dijo que fue por las circunstancias que se vivían afuera del penal.
“Reconozco que no fue correcto lo que hicimos de cómo leer los nombres, pero la urgencia de la presión de la gente que teníamos encima que se estaba brincando ya las mallas que están ahí, afuera del reclusorio, obligó a decirles los nombres. No porque fuera lo correcto, ni lo deseado ni lo conveniente; sino porque las circunstancias así nos colocaron. Se dieron los nombres y por supuesto se distensó el problema”, admitió Astudillo. Información Noticieros Televisa