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Federico Azul/ Yucatán al Instante
Tetiz, Yuc., 1 de mayo 2022.- Los veteranos hombres de campo decían que el monte es sagrado, así como provee también te pasa factura sí te pasas, tal es el caso de dos amigos que acudieron de cacería, pero uno de ellos acabó siendo confundido con un venado para acabar mal herido en montes de este municipio.
Se trata de Cruz Alejandro Baas Chan, de 41 años, quien resultó “venadeado” en terrenos de esta región Poniente.
Le comentamos que Cruz, junto con su padre Florentino Baas Poot, de 66 años, invitaron a su cuate Juan Canul Novelo, de 49 años (a) “Uraña” para ir de cacería la mañana de ayer sábado.
Sin embargo Uraña, oriundo de Hunucmá, y avecindado en este pueblo, se desempeña como carnicero, y pues no tenía ganas de acudir. Por lo que de tanto insistir finalmente Juan acepto.
Los tres se metieron al monte y comenzaron a caminar haciendo tipo “batida”, separando Uraña del papá e hijo. Fue entonces que al buen rato escucharon la detonación de una escopeta, lo que hizo que Cruz se lleve las manos al cuello donde sintió dolor y después empezó a derramar sangre en el rostro. Ante esto el lesionado fue trasladado de inmediato por su padre hasta su humilde vivienda de la calle 9 entre 20 y 22 de esta comunidad, donde arribaron en cuestión de minutos dos ambulancias, elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, así como uniformados de la Policía Municipal para acordonar el área en espera del personal de la FGE con base en Hunucmá para las investigaciones pertinentes.
Uraña presunto responsable del balazo no le quedó de otra que presentarse a la Comandancia y entregar hasta el arma para decir a los agentes que todo fue una “confusión”. Sin embargo las autoridades serían las encargadas del deslinde de responsabilidades. Se ignora el estado de salud del cuarentón, quien al recibir el impacto de lo perdigones rebotó en el hueso a la altura del hombro izquierdo, perforando parte de rostro e incrustar una munición en la garganta.
Cabe señalar que hace varios años el hermano menor de la familia Baas Chan, tuvo similar incidente cuando se encontraba “espíando” en montes que colindan con Kinchil, en aquella ocasión su perro juguetón hizo que se accione la escopeta para activarse y pegarle en uno de sus pies.
