Destaca el secretario general de Gobierno la tarea del Centro de Prevención Social del Delito de Yucatán para integrar a la sociedad en coordinación con el gobierno.- Elevar la calidad de vida a través de una comunidad armónica, objetivo
Mérida, Yucatán, 17 de septiembre de 2017.- “Con una sociedad más armónica y con ciudadanos que se sienten seguros de su entorno social para realizar todas sus actividades, se eleva la calidad de vida. Ése es un gran objetivo de la prevención del delito, en el que trabaja el CEPREDEY”, indicó el secretario general de Gobierno, Roberto Rodríguez Asaf.
El político nacido en Izamal explicó que el Centro de Prevención Social del Delito de Yucatán, dependen directamente de la Secretaría General de Gobierno y sus acciones son transversales en todas las oficinas estatales, porque “la prevención es el cimiento de la seguridad y en ese sentido debe estar presente en todas las áreas”.
“No se escatiman esfuerzos para una prevención social del delito efectiva y cotidiana. El CEPREDEY informa, documenta, capacita y coordina los esfuerzos de la sociedad para tener actividades sanas, cursos en las escuelas y grupos sociales con diversos enfoques que van desde el respeto del medio ambiente y hacia los animales, hasta las habilidades para la vida”, detalló.
Por eso, comentó, “echamos mano de todos los recursos técnicos de avanzada, como esta estrategia de habilidades para la vida que nos permite recabar información, interactuar, identificar valores de riesgo según cada comunidad y gestar en los menores de edad las habilidades necesarias para prevenir y hacer frente a la violencia desde su origen, en la convivencia social”.
“Aquí no se trata de que los ciudadanos respondan a la violencia o al delito, sino de que formemos a nuestra niñez y juventud en los valores que nos distinguen como sociedad armónica: el respeto, la conciencia cívica y la convivencia tolerante hacia todos los demás”, señaló.
Rodríguez Asaf mencionó que el CEPREDEY “lleva instrumentos de prevención a las escuelas y comunidades, y puede ser a través de cursos de baile, de música, así como la formación de grupos deportivos o talleres de manualidades, o en algo tan básico como cursos informativos para padres de familia sobre las formas de inculcar en sus hijos los valores que ya mencionamos”.
“El objetivo es claro: que todos juntos logremos consolidar todos los días como algo natural y propio la prevención social del delito y de la violencia. No como una obligación sino como algo ya natural de todos, algo cotidiano, para que así todos sigamos viviendo en seguridad con nuestras familias, lo que redunda en una mejor calidad de vida”, concluyó.