MADRID.
Uber ha despedido a uno de sus conductores por retransmitir en ‘streaming’ los trayectos con sus pasajeros en su canal de la plataforma Twitch, equipando el coche con dos cámaras, un panel de control y luces LED para obtener vídeos de alta calidad.
El conductor despedido por Uber, Jason Gargat, que operaba en la ciudad de San Luis (Estados Unidos) y sus alrededores, subía en ‘streaming’ a los vídeos de los recorridos de sus pasajeros a través de su cuenta personal en Twitch, donde estos recibían comentarios de otras personas, como ha advertido el medio local St. Louis Post-Dispatch.
Gargat, de 32 años, que trabajaba tanto para Uber como para la compañía similar de trayectos Lyft, conducía un Chevrolet negro en el que realizaba sus servicios, recorridos que grababa y emitía en directo en su canal de Twitch, llamado ‘JustSmurf’, sin el consentimiento de los pasajeros.
Desde el mes de marzo, Gargac realizó más de 700 trayectos con Uber, a lo que hay que sumar los de Lyft, de los que la mayoría han sido emitidos en directo sin que sus clientes tuvieran conocimiento de ello ni concedieran su permiso.
Entre los pasajeros afectados se incluyen niños, estudiantes universitarios ebrios y personajes públicos, como un reportero de televisión o un guitarrista de una banda. Además, durante los vídeos se revelan los nombres de los clientes y conversaciones de carácter privado sobre familiares, amigos, compañeros de trabajo, etcétera.
Mientras tenían lugar las retransmisiones, la audiencia observaba y realizaba comentarios, burlándose en ocasiones o incluso utilizando un tono sexual. El canal de Twitch de Gargac contaba con cuatro mil seguidores y cerca de 100 suscriptores, que incluso pagaban 5 euros al mes al conductor.
Para lograr vídeos de alta calidad, el conductor instaló dos cámaras en el parabrisas, una enfocando al exterior y otra al interior, un panel de control con doce botones que le permitía alternar las cámaras mientras conduce y luces LED color púrpura para iluminar a los pasajeros en condiciones de poca luz.
En una entrevista con el medio citado, Gargac relata que él solo intentaba capturar las “interacciones naturales” entre él y sus pasajeros, lo que para el conductor es un “viaje de Lyft y Uber”. Pese a ello, admite haberse embolsado tres mil 500 dólares con su canal.
El medio citado se puso en contacto con algunos de los afectados para informarles de que fueron grabados, hecho que ninguno de ellos conocía, además de reconocer que, de haberlo sabido, no habrían consentido la retransmisión.
Algunas de estas personas se quejaron a Uber después de conocer la noticia, a lo que la compañía respondió otorgándoles cinco dólares de regalo para su servicio y la promesa de que no volverían a montarse en el vehículo de Gargac.
Respecto a la legalidad de este tipo de acciones, tanto Uber como Lyft declararon que la práctica es legal, puesto que en Misuri solo una de las personas que aparecen en una grabación debe dar su consentimiento, aunque no así en el estado de Illinois, donde también realizó estas prácticas.
Posteriormente y tras revisar los vídeos, Uber ha decidido despedir a Gargac, aludiendo a que su comportamiento “no está en la línea” de las políticas de su compañía, además de imposibilitar el acceso del conductor a la aplicación.
La compañía de transporte ha anunciado este lunes que actualizará sus políticas de uso para responder al problema. Sus reglas actuales solo vetan todo comportamiento inapropiado o irrespetuoso de los conductores, pero no las grabaciones ni su difusión. Lyft también ha decidido despedir a Gargac como conductor de su plantilla, y Twitch ha eliminado su canal, denominado ‘JustSmurf’. Información Excelsior.com.mx