Federico Azul/ Yucatán al Instante
Kinchil, Yuc., a 07 de octubre.- Una maniobra defensiva ayudó a evitar una tragedia en la Kinchil-Celestún, donde el operador de una unidad repartidora de cervezas fue colisionado, y en su astucia el chófer pudo controlar el camión para quedar cruzado en medio de la carretera federal, a la altura del kilómetro 60.
La segunda carretera más peligrosa de Yucatán, volvió a ser noticia en esta ocasión Ángel Vicente Cen Ake, guiaba el Volkswaguen de la empresa Heineken transportando las chevas, para surtir los negocios del puerto, acompañado de otros dos trabajadores en la cabina.
Sin embargo al estar a la altura del kilo 60, un tráiler los rebasó, lo malo que el temerario cafre les pegó en la llanta izquierda delantera para pinchar el neumático, ocasionando que se baje de la carpeta asfáltica y finalmente termine atravesado en el camino poco después de la 13 horas.
Mientras la mole de caja cerrada siguió su trayecto como si nada hacia Celestún.
Se ignora si fue detenido. De pura suerte el camión a nada quedó de volcar, pero al acabar detenido en medio del arrolló de circulación se formo una larga fila que duró casi 4 horas en ambos lados.
Algunos conductores se arriesgaron a pasar en la cuneta, bajo su propio riesgo, pues se tenía que sacar las cervezas y cargar a otra similar unidad para luego iniciar con las maniobras de rescate.
Además de la paralización vehicular, muchos curiosos se acercaron al lugar para ver si había producto tirado que se pudiera rapiñar, pero se quedaron con la sed de recoger las chelas.
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