Códice de Dresde, útil para pronosticar eclipses
A casi mil años de su elaboración, el Códice de Dresde aún funciona para el cálculo y pronóstico de eclipses, afirmó el astrónomo yucateco Eddie Ariel Salazar Gamboa.
Demostró que con el empleo del documento se determinó que de 2017 a 2025 habrán 33 fenómenos solares y lunares, de los cuales, el 18 por ciento será visible en la Península de Yucatán.
A pesar que lleva 10 siglos de existencia, aún sigue vigente y los cálculos se pueden realizar con total certeza.
Agregó que luego de “desempolvar” dicho documento prehispánico, el académico presentó la relación de acontecimientos a que se registran en un lapso de ocho años, por lo que “el conocimiento de los mayas sigue vigente”.
Es decir, luego de más de cinco siglos de desuso, es eficaz su funcionabilidad como tabla para calcular eclipses, pues también se pueden pronosticar, aunque sólo algunos se verán en la región.
En conferencia de prensa presentó los resultados de una década de trabajo en torno a este “pergamino” precolombino, el cual fue elaborado por escribas de Yucatán.
Resaltó el análisis de las páginas 72 a la 86 de este documento del siglo XI, en las cuales están contenidas las tablas de la Luna y de eclipses, demostrando que aún funcionan.
Detalló que con cálculos anteriores a su elaboración, durante el tiempo que fue utilizado y para pronósticos actuales se confirma su actual utilidad astronómica.
“El códice, que actualmente se conserva en Dresde, Alemania, es un documento astronómico, pues contiene información relacionada con el Sol, la Luna, así como los planetas visibles, Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno”, acotó el académico del Instituto Tecnológico de Mérida (ITM).
Recordó que 2008 le interesó volver a utilizar este documento maya, el cual estuvo abandonado por cinco siglos, el cual contiene 64 hojas, escritas en papel amate.
Mencionó que elaboró 10 tablas que contenías diversos períodos de año, y constató la regularidad prevaleciente en el pronósticos de este tipo de sucesos astronómicos.
Paralelismo cultural
Salazar Gamboa resaltó el paralelismo entre los sacerdotes astrónomo babilónicos y los mayas, al establecer un concepto de tiempo similar, al cual hoy se le conoce como saros.
“Los babilónico y los mayas no tuvieron contracto alguno, tanto por la distancia en longitud como en el tiempo de apogeo”, subrayó el profesor jubilado de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY).
Definió el saros como un periodo de tiempo de 223 lunas, o meses sinódicos, con una duración de 29.53 días.
Comentó que el ciclo equivale a seis mil 585.32 días, aproximadamente 18 años y 11 días, período en el cual la Luna y la Tierra regresan cerca a la misma posición en sus órbitas, y se pueden repetir los eclipses.
Es decir, suponiendo que hoy se registró un eclipse solar, el mismo suceso se observará el 23 de noviembre de 2036, abundó al presentar la actualización del pronóstico de eclipse, con base a las tablas contenidas en el códice de Dresde.
Remarcó que “los mayas también descubrieron que de alguna manera el mismo eclipse se repite cada 18 años, anexando 11 días más, y lo mismo ocurrió con los caldeos (de la antigua Babilonia)”.
El especialista añadió que la reciente tabla elaborada, demostró la eficacia del Dresde, es la correspondiente del 26 de febrero de 2017 al 21 de septiembre de 2025, período en el cual hay tres mil 129 días.
Asimismo, en éste margen de tiempo hay 106 lunaciones, de los cuales 33 corresponden a eclipses, y de estos, seis son visibles para la Península de Yucatán.
Hasta el momento ya se observaron los correspondientes al 31 de enero y el 21 de agosto de 2017, y el próximo será el 16 de julio de 2019, el cual será parcial de Luna, concluyó.