Por intentar desafiar a lo sobrenatural, un grupo de amigos se llevaron el susto de su vida al jugar con una ouija escrita a mano, pues pensaron que nada ocurriría, pero al final todos tuvieron que salir corriendo.
Y es que hasta se atrevieron a grabar el suceso, para tener pruebas de que nada ocurriría. Se llevaron la ouija -pintada en una cartulina- a una cocina oscura; prendieron una vela y comenzaron a abrir el portal para que les respondieran dudas.
“Nosotros no creemos en lo que vemos en la TV, así que vamos a ver qué pasa con unas simples preguntas, sin tomarnos de la mano, sólo veremos qué pasa”, dicen los jóvenes en el video de poco más de aun minuto.
Entonces preguntan y esperan ansiosos a la respuesta, pero de la nada uno de los objetos sale volando hacia ellos y corren muy espantados para abandonar la habitación.
Aunque unos juran que el video es real, otros dudan de lo sucedido.
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