Usuarios en redes sociales y médicos internos de pregrado del Hospital General Ecatepec denunciaron irregularidades en el fallecimiento del doctor Jorge Alejandro López Rivas, miembro de la FES-Iztacala UNAM que brindó servicios a dicha institución y tuvo una serie de problemas a causa de complicaciones por el COVID-19 hasta que perdió la vida.
De acuerdo con las declaraciones e información recabada desde el momento del fallecimiento, Jorge Alejandro López Rivas era médico interno de la Facultad de Estudios Superiores Iztacala, y aunque el 4 de enero perdió la vida a raíz del SARS-CoV-2, durante el ejercicio de su labor atendió a pacientes sospechosos de COVID-19 sin equipo de protección.
El 12 de diciembre comenzó a presentar síntomas de esta enfermedad y, según los testimonios, al avisar a un médico del servicio adscrito, este no le hizo caso y le obligó a continuar su guardia.
Después, Jorge Alejandro acudió a una valoración médica en la que los especialistas señalaron que no contaba con la facultad para respirar, pero “no se veía tan mal”, por lo que tuvo que seguir ejerciendo su profesión sin mayor asistencia hospitalaria.
Al paso del tiempo Jorge empeoró su estado de salud, sin embargo el lugar en el que trabajaba solo le explicó que necesitaba una “valoración en esta Unidad o en su Unidad de Medicina Familiar o prueba positiva de PCR” para que se le pudiera brindar una incapacidad. En caso de no presentar dicho documento, se señalaría que estaba incumpliendo con su labor.
Tras su muerte, su facultad y sus compañeros emitieron un pliego petitorio que esclareciera los hechos, según se ha difundido en redes sociales.
Ante lo sucedido, la Facultad de Estudios Superiores Iztacala (FES-Iztacala UNAM) llegó a la decisión de retirar en su totalidad al equipo de médicos internos pasantes de Pregrado del Hospital General de Ecatepec en el que Jorge laboraba.
Esto lo dio a conocer la doctora María del Coro Arizmendi Arriaga, estipulando que los internos no volverán a la dependencia “hasta que se mejoren las condiciones para que todas y todos puedan realizar su trabajo con las medidas de seguridad adecuadas.”
“La perdida de la vida de Jorge Alejandro llena de tristeza a la Universidad Nacional y a nuestra Facultad… deja en evidencia el fuerte compromiso y vocación de nuestros alumnos, quienes se encuentran cumpliendo con la responsabilidad social de nuestra institución… No dejaremos de exigir a las autoridades que se refuercen las condiciones necesarias para que nuestras y nuestros alumnos continúen su preparación en distintos hospitales, que tanto necesitan su apoyo”, concluyó en el documento.
Por otra parte, el resto de compañeras y compañeros de Jorge, así como amigos, familiares y usuarios de redes sociales, exigieron obtener más información sobre su fallecimiento y una resolución a este caso en particular.
A través de diversas publicaciones muchos han mostraron su inconformidad por la forma en que se ha atendido al personal de salud que hace frente al a crisis sanitaria por el COVID-19.