Ciudad de México –
Viral en internet desde hace un par de semanas, el video del jugador México-americano de 12 años, Alex Alcalá, provocó que lo bautizaran como el “Messi mexicano”.
Detrás de esos videos y del apodo llamativo está la historia de un niño que descubrió su talento a los siete años, momento en el que se aferró al sueño de ser profesional, lo cual lo ha llevado a campamentos con filiales del Barcelona y entrenar en categorías infantiles del Manchester City.
“No dejo que se me suba a la cabeza (el apodo) porque yo mismo no digo que juego como Messi”, dijo en entrevista con Mediotiempo, luego de su concentración con el Tri Menor y antes de volar de regreso a su natal California.
Alejandro Alcalá Solorio nació el 20 de octubre del 2005 en la pequeña ciudad de Lodi en California. Hijo de madre méxico-americana y padre moreliano, comenzó su formación futbolística en el Stockton TLJ, en la ciudad del mismo nombre.
Gracias a la labor de “scouteo” de las Selecciones Mexicanos Menores, el Tri juvenil dio con el chico para convocarlo por primera vez a la Sub-15, la cual realizó campamentos de entrenamientos la semana pasada en el Centro de Alto Rendimiento.
“Fue una buena experiencia, hice amigos. Entendí un poco más del idioma porque allá habló en español”, señaló un tímido Alex, que tiene al inglés como su lengua materna.
Más allá de esas dos experiencias con equipos europeos, es el Pachuca el único equipo que le ha ofrecido realmente incorporarlo a sus fuerzas básicas, para ofrecerle un plan de desarrollo pero en México. Sin embargo, Alex aún no quiere salir de Estados Unidos.
“Él quiere ser niño todavía, así que por eso aún no quiere venir a México”, dijo su mamá, Mariana Solorio, de 30 años de edad, quien además apoya a su hijo si algún día está en la encrucijada para jugar por el Tri o Estados Unidos.
“Sería decisión de él, le tenemos mucho respeto a lo que él decida. Si lo llaman de Estados Unidos, sería su decisión. Si quiere intentarlo allá, adelante”, agregó.
Aunque Alex acepta que se siente más cercano a sus raíces estadounidenses, sus ídolos, más allá de Messi, Cristiano y Neymar, son todos mexicanos.
“Mis ídolos son Chucky Lozano,Tecatito Corona y Héctor Herrera, esos tres son mis ídolos, porque ellos juegan como yo. Del Chucky me gusta cómo se mueve, cómo maneja la pelota y cómo anota”, relató.
Es así como Alex Alcalá, el diamante en bruto que tiene la Selección Mexicana Sub-15, busca crecer como futbolista pero seguir viviendo como un niño hasta que el tiempo se lo permita. Por ahora, tiene el apodo del “Messi mexicano”, y quizá en el futuro, lo convierta en una realidad para el Tri mayor. Información Medio Tiempo