Las redes sociales de Kenia reaccionaron con indignación a una información publicada por un diario local en la que se revela que un grupo de 20 parlamentarios viajaron al Mundial de Rusia 2018 a expensas del erario público, que les sufragó billetes de avión, alojamiento, dietas y entradas para los partidos.
El diario The Star indicó que el grupo se compone de 14 diputados y seis senadores, a los que un portavoz del Parlamento defendió: “Es su responsabilidad entender los deportes y cómo ser anfitriones de torneos internacionales como este. No son unas vacaciones, y es simplista pensar que solo han ido a divertirse”.
Sin embargo, el gasto que supuso enviar a los diputados -debido a la demanda, solo el billete de avión de Nairobi a Moscú puede superar actualmente los 400 mil chelines (3.970 dólares, 3.410 euros)- contrasta con los salarios en Kenia, un país en el que más del 35 % de sus habitantes viven con menos de dos dólares al día.
Tan solo las dietas para los 20 parlamentarios le costarán al país algo más de 20 millones de chelines (205 mil dólares, 177 mil euros).
El activista Okiya Omtata, conocido por impulsar procesos legales relacionados con casos de corrupción, afirmó que el viaje es “una estafa” y un “descarado abuso del cargo”, por lo que reclamó que los parlamentarios “paguen un recargo”.
En líneas similares se expresaron múltiples usuarios en Twitter, como Keym Keymoh, que se preguntaba “¿Y cómo intentarán ahora hacerse pasar por representantes del pueblo?”.
Entre las quejas más comunes destacan las dirigidas al senador James Orengo, una de las figuras más destacadas de la oposición, al que un miembro de esta red le espetaba que “nunca debería volver a aleccionar a los kenianos sobre el despilfarro de recursos y la corrupción”.
Sin embargo, no todas las voces en las redes sociales mostraron indignación, como la del usuario Kinyua Abala, que escribió: “Los diputados viajan a todos lados todo el tiempo. No entiendo por qué los kenianos se enfadan por este viaje a Rusia”.
Otros mensajes no ponían el foco sobre los diputados sino sobre sus votantes: “¿Por qué se enfadan los kenianos? ¿Por su propio reflejo en el espejo que son los parlamentarios? Es absurdo si se considera que les votaron a pesar de saber que la mayoría de ellos son retorcidos y solo se preocupan de ellos mismos”.
En los últimos meses, Kenia vivió dos escándalos relacionados con eventos deportivos: el primero, después de perder el derecho a organizar un campeonato africano de selecciones a pocos meses de su inicio debido a que los estadios no se habían reformado, y el segundo, la suspensión de un árbitro asistente que iba a participar en el Mundial por haber aceptado sobornos. Información Excelsior.com.mx