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Pachuca es el segundo equipo del fútbol mexicano en jugar la final de, lo que antes se consideraba como Mundial de Clubes, hoy, Copa Intercontinental; el mérito del conjunto hidalguense recae en la plantilla con la que cuenta. No es una nómina abultada como la de Tigres, que en 2020 también jugó esta instancia del torneo de clubes; en ese entonces varios de los jugadores del equipo de Nuevo León pasaban por un gran momento, a Bayern Munich le costó trabajo y alguno que otro susto quedarse con la victoria. En esta edición, Pachuca llegó a la cita con un plantel poblado en gran número por jugadores, formados de sus fuerzas básicas y otros también muy jóvenes, que se plantaron con mucha personalidad en los tres partidos que disputaron de la justa intercontinental.
No es algo sencillo ganar, golear, al campeón sudamericano; al club vencedor de Copa Libertadores. Botafogo tuvo que vencer al Sao Pablo, Peñarol y Atlético Mineiro en las instancias finales de Libertadores, equipos históricos en Brasil y Uruguay; además de que cuenta con uno de sus mejores cuadros de todos los tiempos. No solo eso, la final del torneo de CONMEBOL, la jugó con diez hombres desde el segundo minuto de partido y, aun así, logró anotar tres goles por uno en contra. Es decir, los antecedentes colocaban a Botafogo como un candidato serio para contender al título intercontinental. Pero el equipo de Pachuca no se encogió para nada y con un agradable partido venció por tres goles a cero al campeón, también, del Brasileirao. El partido semifinal, o Copa Challenger, resultó un poco más complicado, el conjunto Al Ahly egipcio, cerró las conexiones entre Deossa, Idrissi y Rondón que hicieron daño contra el equipo brasileiro, la defensa egipcia resultó muy rápida para el jugador marroquí de Tuzos, por ejemplo, que no pudo desdoblar con peligro por su banda; el partido terminó en la tanda de penales de la que Pachuca se recuperó casi milagrosamente después de haber fallado sus dos tiros iniciales.
El partido contra Real Madrid resultó una muestra de orgullo y dignidad deportiva de un cuadro lleno de jóvenes, apuntalado por jugadores con experiencia fuera de México; la diferencia de planteles es enorme, mientras la plantilla de Pachuca ronda los 50 millones de euros en valor, la del conjunto merengue sobre pasa los mil millones. Aún así, al equipo español le costó 30 minutos para anotar el primer gol, después de que Pachuca generó peligro en la portería madridista con un par de tiros, de Luis Rodríguez e Idrissi en los que Courtois se tuvo que emplear a fondo para no ver su meta caer. Los siguientes dos goles del conjunto blanco tienen cierta controversia; el segundo parece que hay un fuera de lugar en el que estorban a Moreno para tapar el tiro de Rodrygo y el tercero es un penal marcado con mucho rigor que el portero hidalguense estuvo a punto de atajar a Vinicius. Al final, el tridente madrileño, Mbappé, Vinicius y Rodrygo fueron los anotadores contra un Pachuca que, habiendo terminado en la posición 16 de la tabla general del Apertura 2024, aún tuvo un par de oportunidades para acortar el marcador.
Pachuca defiende al fútbol mexicano en la cancha y fuera de ella; recientemente, en la junta de dueños, Grupa Pachuca logró conformar un frente para evitar el endeudamiento de la liga mexicana con un fondo de inversión extranjero, con el que se pretendía inyectar capital a la Liga Mx, pero que no definía de manera equitativa los destinos de dicha inversión; a los equipos ya preponderantes económicamente les tocaría una mayor tajada mientras que todos asumirían la deuda por igual. El grupo empresarial que contiene a León y Pachuca, desde hace algún tiempo, se ha opuesto a los designios dictados por el duopolio televisivo, y sus equipos, a decisiones que han priorizado lo económico y sus propios privilegios, sobre los temas deportivos que afectan al fútbol mexicano. Aunque hay equipos que no quitan el dedo del renglón acerca del fondo privado, la salida de la persona que había sido comisionado encargado del desarrollo de la liga, ha sido un duro golpe para los intereses, apartados del fútbol, de varios equipos que ven al este deporte en México solamente como un negocio, una empresa personal, de la que pretenden sacar cada vez más dividendos. Cuando los clubes con objetivos meramente deportivos, sin una empresa gigante atrás de ellos, como una televisora, busca el mejoramiento del deporte en sí.
Pachuca es un contrapeso en la liga, con una proyección internacional que los clubes con grandes nóminas no han podido alcanzar. Desde una Copa Sudamericana que se ganó en el Estadio Nacional de Santiago de Chile, contra Colo Colo, hasta esta más reciente final contra Real Madrid, el club hidalguense muestra el camino, por el que continuará también este verano en el Mundial de Clubes; México contará con tres representantes, Monterrey y los dos equipos de Grupo Pachuca. Información Radio Fórmula