• El consumo de alcohol con moderación no refiere a ningún tipo de enfermedad.
Mérida. Yucatán a 29 de marzo de 2021.- Algunas veces se conoce la causa del cáncer de hígado, como en el caso de las infecciones crónicas por hepatitis. Pero a veces el cáncer de hígado ocurre en personas sin enfermedades preexistentes y no está claro qué lo causa, señaló la Dra. Laura Civeira Gonzalez, epidemióloga del ISSSTE en Yucatán.
Dijo que algunos de los factores que aumentan el riesgo de padecer cáncer primario de hígado son los siguientes:
Infección crónica por el virus de la hepatitis B o el virus de la hepatitis C. La infección crónica por el virus de la hepatitis B o el virus de la hepatitis C aumenta el riesgo de padecer cáncer de hígado.
La Cirrosis, afección progresiva e irreversible hace que se forme tejido cicatricial en el hígado y aumenta las probabilidades de desarrollar cáncer de hígado.
Apuntó que algunas de las enfermedades hepáticas que pueden aumentar el riesgo de padecer cáncer de hígado son la hemocromatosis y la enfermedad de Wilson.
Los diabéticos son propensos a padecer cáncer de hígado. Las personas con este trastorno del azúcar en sangre tienen un mayor riesgo de padecer cáncer de hígado que las que no tienen diabetes.
Y la carta estrella de ser propensos a padecimiento de cáncer en el hígado es el consumo excesivo de alcohol. Consumir diariamente y durante muchos años una cantidad de alcohol que es superior a la moderada puede llevar a un daño hepático irreversible y aumentar el riesgo de padecer cáncer de hígado.
Para reducir el riesgo de padecer cirrosis, la especialista recomendó estos consejos:
• Si bebes alcohol, hazlo con moderación.
Si decides beber alcohol, limita la cantidad. En caso de las mujeres, esto significa no más de una copa al día. En el caso de los hombres, el límite es de no más de dos copas al día.
• Mantén un peso saludable.
Si tu peso actual es saludable, sigue una dieta equilibrada y haz ejercicio la mayoría de los días de la semana para mantenerlo. Si necesitas bajar de peso, reduce la cantidad de calorías que consumes por día y aumenta la cantidad de actividad física.
Y por último recomendó vacunarse contra la hepatitis B. Con esta inmunización se puede reducir el riesgo de contraer el mal. La vacuna puede administrarse a casi cualquier persona, incluidos bebés, adultos mayores y personas con sistemas inmunitarios comprometidos.
Comentó que el alcoholismo es un mal que padece un alto porcentaje de la derechohabiencia del ISSSTE en Yucatán, no respeta edad, sexo, estado civil, ideología, condición económica, ni capacitación. Señaló la Dra. Laura Civeira, epidemióloga del ISSSTE al dar a conocer que esta instancia de seguridad social desarrolla las acciones correspondientes para recomendar a los usuarios y derechohabientes en general de los planteles de salud de la Institución a no caer en las redes de este vicio que incluso puede causar la muerte. El ISSSTE cuenta con acuerdos interinstitucionales para tratamiento de adicciones.
Refirió que el alcoholismo es una enfermedad progresiva, crónica y degenerativa; con síntomas que incluyen una fuerte necesidad de tomar a pesar de las consecuencias negativas.
La enfermedad está caracterizada por daños físicos en todos los sistemas del organismo, siendo los más complicados los que se relacionan con el sistema cardiovascular, el sistema nervioso y el hígado.