WASHINGTON.
Dos días después de disturbios en un acto de supremacistas blancos en Estados Unidos, el presidente Donald Trump condenó finalmente de manera enérgica el racismo, tildando de “repugnantes” a los grupos neonazis y al Ku Klux Klan (KKK).
El racismo es el mal”, dijo el mandatario desde la Casa Blanca. “Y los que causan violencia en su nombre son criminales y matones, incluyendo el KKK, los neonazis, los supremacistas blancos y otros grupos de odio que son repugnantes a todo lo que queremos como estadunidenses”, añadió.
El mandatario habló en la Casa Blanca después de reunirse con el secretario de Justicia Jeff Sessions y el director del FBI Christopher Wray sobre la violencia entre supremacistas blancos y contramanifestantes el sábado en Charlottesville, Virginia.
En el incidente, una mujer de 32 años murió y otras 19 personas resultaron heridas al ser embestidas por un vehículo en medio de los enfrentamientos.
El Departamento de Justicia lanzó una investigación de derechos civiles por el incidente en el que murió Heather Heyer. El conductor del vehículo, James Alex Fields Jr., de 20 años, sigue arrestado.
El Presidente no había condenado abiertamente a los militantes de extrema derecha en Charlottesville, algunos de los cuales llevaban gorros o camisetas con la imagen del empresario.
Trump, criticado por demócratas y republicanos de indulgencia hacia la extrema derecha por su tibia respuesta inmediata, prometió “justicia” y analizar el tema con el fiscal general Jeff Sessions y el director del FBI, Christopher Wray.
Sessions dijo a la cadena ABC que el ataque “cumple con la definición de terrorismo doméstico (que figura) en nuestra legislación”.
Momentos antes, Trump evadió las preguntas que le hicieron a gritos los periodistas sobre los enfrentamientos raciales en Charlottesville.
A las voces de condena tras lo ocurrido en Virginia se sumó la de la canciller de Alemania, Angela Merkel, calificó de “violencia racista ultraderechista”. Dijo que “hay que actuar con total contundencia”.
Centenares de manifestantes marcharon frente a la Trump Tower en Nueva York para denunciar la primera visita del Presidente a su departamento desde su investidura.
LE RENUNCIAN
Trump arremetió contra el director de la farmacéutica Merk, Kenneth Frazier, después de que el ejecutivo renunció a un consejo asesor presidencial porque el mandatario no condenó de inmediato la violencia.
Frazier, escribió en Twitter que “los líderes de EU deben honrar nuestros valores fundamentales y rechazar cualquier expresión de odio, intolerancia y supremacía de grupo…”.
El presidente Trump tuiteó que Frazier “¡tendrá ahora más tiempo para BAJAR LOS ESTAFADORES PRECIOS DE LOS MEDICAMENTOS!”. Información Excelsior.com.mx