CIUDAD DE MÉXICO.
Los cárteles mexicanos son los principales proveedores de drogas a Estados Unidos, y ni la construcción de muros fronterizos iniciada por el presidente Bill Clinton ni el endurecimiento de la política antidrogas que decretó Ronald Reagan lo han impedido, afirma un reporte de la Junta de Fiscalización Internacional de Estupefacientes.
Las fronteras son los principales puntos para el tráfico de mariguana, cocaína y heroína, así como metanfetaminas, señala el informe.
Los cárteles se valen de drones, catapultas, túneles, mensajería, ropa, alimentos, dulces, juguetes o animales para introducir la droga. El pasado 27 de enero fueron confiscados 102 kilos de mariguana en un tanque de gas.
Donald Trump firmó el 25 de enero una orden para continuar la construcción del muro. Además, ha insistido en que México lo pagará.
Muro de Trump no evitará el paso de droga
El muro en la frontera, iniciado por Bill Clinton en 1994, o el endurecimiento de las políticas en el combate a las drogas, anunciado por Ronald Reagan el 20 mayo de 1988, al considerarlas como “enemigo público número uno” de Estados Unidos, no han evitado que los cárteles sigan siendo los principales proveedores de narcóticos del gran mercado de Norteamérica.
La Junta de Fiscalización Internacional de Estupefacientes (JIFE, por sus siglas en inglés) indica que diferentes puntos de la frontera México-Estados Unidos son un poroso paso para el trasiego de mariguana, cocaína, heroína y metanfetaminas.
El último reporte del JIFE menciona que la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) considera a las metanfetaminas y la heroína como una amenaza para ese país, principalmente en estados del noreste y centro norte, debido a que su disponibilidad es cada vez mayor.
Los cárteles de la droga mexicanos también han aumentado su participación en el mercado ilícito de heroína en Estados Unidos y se han convertido en los principales traficantes de heroína al por mayor en varias de las grandes ciudades”, menciona el documento.
El documento del JIFE señala que la mayor parte de la metanfetamina que circula EU se fabrica en México; normalmente la droga es ingresada en forma líquida, mezclada en un disolvente para dificultar su detección.
Donald Trump, presidente de Estados Unidos, aseveró desde antes de ser candidato que México enviaba drogas, criminales y violadores a su país, y que por eso iba a construir un muro en la frontera, cuyo costo México debía de pagar.
Los narcóticos que se introducen a EU han comenzado a tener efectos de salud, medidos por el aumento de atenciones médicas y las muertes registradas en los últimos años, según el Informe sobre uso de drogas en las Américas 2015.
El problema de los narcóticos también es abordado en la Evaluación nacional de la amenaza de las drogas 2016, publicado en diciembre por la DEA.
Las muertes por sobredosis de heroína son altas en todo Estados Unidos, particularmente en el noreste y el medio oeste. Las muertes por sobredosis se triplicaron entre 2010 y 2014; con los datos más recientes, diez mil 574 personas murieron en 2014 por sobredosis de heroína en Estados Unidos”.
El documento resalta un aumento de 79% en las muertes por “opioides sintéticos”, al pasar de tres mil 97 en 2013 a cinco mil 544 en 2014.
La disponibilidad y el uso de cocaína en Estados Unidos aumentaron entre 2014 y 2015, y es probable que continúe aumentando en el corto plazo”, señala el informe.
LOS CRUCES PRINCIPALES
La PGR tiene identificados a Baja California y Sonora como los principales puntos fronterizos por donde los cárteles mexicanos ingresan droga a Estados Unidos.
Fuentes consultadas explicaron que en los años recientes se ha incrementado las incautaciones de narcóticos en la frontera común.
Sin embargo, las autoridades consultadas reconocen que los narcotraficantes modifican constantemente los métodos para ingresar la droga, lo que dificulta su detección.
Documentos de la PGR a los que tuvo acceso Excélsior muestran que entre enero de 2013 y diciembre de 2016, las autoridades de México aseguraron más de 302 mil toneladas de diferentes drogas en las fronteras de Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila y Tamaulipas.
De ellas, más de 74% fueron incautadas en Baja California y Sonora. Los registros de la PGR muestran que los decomisos se realizan principalmente de drogas como mariguana, heroína y cocaína.
En 2015, las autoridades evitaron que los cárteles ingresaran a Estados Unidos 157 mil 983 diferentes narcóticos. El año pasado los decomisos bajaron, a sólo 74 mil 674 toneladas.
A pesar de las incautaciones y el despliegue de las Fuerzas Armadas en el combate contra al narcotráfico iniciado por el entonces presidente Felipe Calderón el 11 de diciembre de 2006, el trasiego de droga continúa.
Se estima que cada año los cárteles mexicanos generan ganancias por 320 mil millones de dólares por ventas al menudeo, de acuerdo con el estudio El problema de las drogas en las Américas que llevó a cabo la Organización de los Estados Americanos (OEA) en 2015.
Con túneles, drones y limones burlan cerco
Con drones, catapultas, túneles, mensajería o incluso oculta en ropa, alimentos, dulces, juguetes o en animales, los cárteles mexicanos han diversificado en los últimos años sus métodos para introducir droga a Estados Unidos.
Entre los aseguramientos más singulares realizados en los últimos años está el del pasado 27 de enero, en Coahuila, donde fueron incautados 102 kilos de mariguana dentro de un tanque de gas LP.
En Baja California se han asegurado drones cargados de cocaína o tablas de surf rellenas de heroína y controladas a control remoto.
Además, se tiene identificado que los narcotraficantes utilizan catapultas, avionetas, lanchas rápidas, submarinos hechizos, aunque uno de los modos más recurrentes es usar “mulas ciegas”, como se les llama a los automovilistas que cruzan con frecuencia a Estados Unidos sin saber que llevan droga, así como túneles.
El 21 de enero de 2015, un dron cargado con tres kilos de crystal cayó en el estacionamiento de un centro comercial cercano a la frontera con Estados Unidos.
El 17 de julio, un “submarino” hecho con una tabla de surfear para llevar droga por mar fue asegurado en Playas de Tijuana, con casi 20 libras de crystal valuado en 100 mil dólares.
La Defensa Nacional ha localizado 60 pistas de aterrizaje clandestinas en Baja California; 50% de ellas son rehabilitadas por los cárteles.
Por encima, por debajo, por los costados, incluso a través del muro fronterizo, con los recursos técnicos y financieros a su alcance, pero principalmente con mucho ingenio, los narcotraficantes han encontrado innumerables formas de pasar la droga hacia Estados Unidos, burlando todas las medidas de seguridad y la vigilancia de la Patrulla Fronteriza.
Desde 1990, cuando la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza descubrió el primer narcotúnel que el cártel de Sinaloa construyó por instrucciones de Joaquín El Chapo Guzmán entre Agua Prieta, Sonora, y Douglas, Arizona, las autoridades han descubierto alrededor de 200 pasadizos clandestinos.
Según la DEA y el ICE, 95% de los narcotúneles han sido cavados desde Baja California y Sonora.
En Chihuahua, los grupos criminales usan a automovilistas particulares que cotidianamente cruzan de Ciudad Juárez a El Paso sin que ellos se den cuenta, hasta que son descubiertos en las garitas.
Uno de los casos más sonados fue el de la maestra Ana Isela Martínez Amaya, arrestada en posesión de 50 kilos de mariguana.
Ella fue la “maestra del año” en la high school de La Fe, del centro-sur de El Paso, Texas, pero en una revisión de rutina los militares encontraron droga en su auto.
-Con información de Marcos Muedano, Alma Gudiño, Arturo Salinas, Carlos Coria, Daniel Sánchez Dórame y Aracely Garza Información Excelsior.com.mx