Por Raúl Orvañanos
A menos que ocurra una catástrofe en el Estadio Azteca contra el Salvador, la Selección Mexicana tiene seguro su pase directo al Mundial de Catar en 2022; en un principio, tanto la elección del cuerpo técnico, como las convocatorias que de él derivaron, parecían las adecuadas. La designación de Martino como entrenador, levantó las esperanzas de lograr lo que no se había logrado en otros mundiales, después de todo fue director técnico de Barcelona y la Selección Argentina, aunque lograra muy poco con cada uno de esos conjuntos. Por fin había llegado a nuestro futbol alguien de grandes tablas, que había estado en grandes estadios, escenarios, alguien que el equipo mexicano sí merecía. Al pasar la eliminatoria y algunas otras competencias oficiales, el propio entrenador se dio cuenta de la peculiaridad que significa estar al frente del equipo de futbol de México. Tantos intereses y opiniones sobre la casaca verde que llegan a distraer, tanto a jugadores, como al mismo cuerpo técnico.
No se puede decir que el paso de Martino al frente de la Selección ha sido lo suave y terso que se esperaba; los problemas internos en el equipo heredado de un fracaso mundialista más en Rusia 2018, tenían al grueso del equipo inconforme con los elementos que se empezaban a considerar a sí mismos como vacas sagradas, como jugadores inamovibles. Así, queriendo dar un golpe de autoridad se hizo una especie de limpia en el cuadro mexicano, en donde barrieron y borraron a algunos jugadores que, fluctuaron entre el mal rendimiento o cambiaron de liga a una que no exigía mucha calidad, curiosamente de donde se rescató a Martino. El entrenador argentino quiso darle un corte europeo a la selección nacional, llamando a jugadores que hace tiempo jugaron en ese continente, aunque hoy estén lejos de su mejor versión; siguió convocando al pie veterano con uno, dos o más mundiales a cuestas, para contagiar de experiencia al resto de los convocados.
Pero el futbol es muy distinto hoy, casi todas las selecciones del mundo, al menos las más protagonistas, se encuentran en un cambio de generación importante, en el que sus estrellas de tiempos pasados son rápidamente sustituidas por una camada de jóvenes jugadores que empujan con mucha fuerza, velocidad y calidad la salida de los antiguos protagonistas de los equipos que representan a algún país. Hoy, por ejemplo, no queda ningún campeón del mundo de 2010 en la selección española, Italia no encontró en sus nuevos jugadores un equipo que le hiciera volver a la Copa del Mundo y por segunda vez consecutiva, se quedó fuera del máximo certamen futbolístico. Pero en México se confía mucho en la experiencia, o muy poco en la juventud, y se siguió convocando a los mismos jugadores a pesar de que no pasaban un buen momento en sus clubes; entonces se desperdiciaron oportunidades para ver nuevas caras, para lograr una competencia deportiva sana por un lugar en Catar. Se borró la opción de que otros nombres pudieran salvar los puntos que no se consiguieron en la eliminatoria por el ritmo lento, cansino y fuera de forma de algunos elementos en partidos que normalmente se ganaban, sobre todo en el Estadio Azteca.
México está casi en el Mundial, pero con un sabor de boca extraño; no se le pudo ganar a Estados Unidos en cuatro partidos, dos eliminatorios, Copa de Oro y Nations League, se perdieron tres de esos encuentros y en los últimos dos no se le pudo anotar ni un solo gol; lo mismo Canadá, otrora una selección que no se complicaba y menos en la altura de la Ciudad de México, hoy no se tiene ni una sola victoria en las eliminatorias. Como local se perdieron puntos importantes contra Costa Rica, que no es la misma selección de hace dos mundiales, también en un proceso atorado de cambio generacional, y contra la misma Canadá, hoy, líder de la competencia, algo que nadie habría previsto.
El Mundial tardará más de lo acostumbrado, el verano en Medio Oriente es en extremo caluroso, por lo que tendrá que ser recorrido hacia las estaciones más frías en esa zona del mundo; el último partido eliminatorio de CONCACAF se juega este jueves, por lo que hay un gran lapso para que inicie la actividad mundialista para la Selección Mexicana, tal vez se pueda aprovechar para ver otros nombres en las listas de convocados y haya oportunidad para elementos que han levantado la mano, u otros han levantado su mano por ellos, y que no tuvieron cabida en los juegos de eliminatoria. Información Radio Fórmula