En julio de 2019, una joven de 15 años fue encarcelada en Egipto por asesinar con 14 puñaladas a un hombre que trató de violarla, por lo que ahora se le impuso una fianza de 10,000 libras egipcias -cerca de 12 mil pesos mexicanos- para su liberación.
La sentencia impuesta contra la joven ocasionó que decenas de mujeres se manifestaran en El Cairo, Egipto, y redes sociales con la referencia de “La niña del Ayat” para mostrar su apoyo a la adolescente que fue agredida cuando paseaba por el zoológico de Giza con su novio.
En aquel momento, la pareja de la joven había perdido su celular y un conductor de un microbús se puso en contacto con ella para devolverle el supuesto aparato.
Cuando la joven, identificada como Amira, se reunió con el supuesto ‘héroe’, este le dijo que su novio ya había recuperado su celular, pero se ofreció a llevarla hasta su casa para recompensar su tiempo perdido y la confusión.
La joven aceptó el viaje, sin embargo cuando iban hacia su domicilio, el vehículo se desvió hacia una carretera solitaria en la que el agresor trató de aprovecharse de ella amenazándola con un cuchillo.
En medio del suceso, la joven creyó que era una buena idea fingir que cedía con su violador para después arrebatarle su cuchillo y propinarle 14 puñaladas, causando la muerte de su agresor.
Después de los hechos, la adolescente se entregó a la policía y alegó que había cometido el crimen en defensa propia, pero fue encarcelada en un centro de detención de menores en espera que un juicio fallara a su favor.
A finales de julio, los cargos por el homicidio de Amira fueron renovados, por lo que su abogada, Dina Elmokadem, solicitó una petición para liberarla diciendo que su cliente estaba “sola y asustada en una zona desértica” y que “se defendió de alguien que le quería hacer daño”.
Ante la fianza impuesta por el Tribunal de Giza del Sur, el padre de la joven dijo que no contaba con los recursos para pagarla y esto, junto al ‘encarcelamiento injustificado’ de la joven, provocó que el caso encendiera un debate sobre el acoso sexual en Egipto.
Este creció y se extendió entre las comunidades de apoyo y respeto a la libertad y seguridad de las mujeres, ocasionando que a meses de su aprehensión, el caso de Amira siga a la vista de las personas y se dé seguimiento a su proceso de liberación.
Cabe mencionar que, de acuerdo con los artículos 245 al 251 de código penal egipcio, es legítimo herir, golpear y matar a una persona solo cuando el o la causante del homicidio lo haga en defensa propia, para poner a salvo su vida o cuando se tengan fundamentos plausibles para cometer este hecho, pero en el caso particular de Amira, ha habido una gran cantidad de obstáculos que complican su situación.
Con información de La Vanguardia y Middle East Monitor