Al interior de una casa en Tokio, técnicos especializados en exterminar plagas de insectos hallaron varios cuerpos de bebés conservados dentro de botellas.
Los técnicos laboraban en obras de restauración de un edificio que estaba abandonado desde hace unos tres años. En el inmueble había vivido un médico obstetra. Las botellas con los cadáveres de los recién nacidos se encontraban bajo el suelo de la residencia.
De acuerdo con la agencia Kyodo, citada por Reuters, los restos estaban conservados en una sustancia similar a la formalina. Incluso algunos cuerpos todavía tenían los cordones umbilicales.
Hasta el momento, la policía japonesa se ha negado a confirmar el hallazgo. Información Radio Fórmula