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Una enfermera embarazada de 48 años que esperaba el autobús para volver a su casa, fue abusada sexualmente por un inmigrante ilegal en Italia.
Los hechos sucedieron el domingo 26 de abril, alrededor de las 15:00 horas, en Nápoles, Italia.
A través de medios locales, la enfermera reportó que mientras el sujeto abusaba de ella la amenazaba de muerte.
“Él repetía, ‘déjame hacer lo que quiera o te mataré’”.
La mujer asegura que no pudo defenderse, pues el agresor “tenía el doble de mi tamaño y todo su peso estaba en mi espalda”.
La víctima aseguró que el agresor se puso aún más violento porque “mis jeans estaban demasiado ajustados y no podía quitármelos”.
La enfermera trabaja con personas que sufren de traumas psiquiátricos tras haber sido contagiados por la COVID-19.
Lo más triste del asunto es que la víctima confesó que al momento de sufrir la agresión, otra mujer iba pasando por el lugar, pero cree que no escuchó sus gritos de ayuda.
El repugnante ataque ocurrió en la parada de autobús Corso Arnaldo Lucci Metropark, justo en la parte trasera de la estación principal de trenes de la ciudad.
La víctima dijo que antes de ser atacada esperó por una hora el autobús, y es que con la emergencia sanitaria, los servicios públicos de transporte se redujeron drásticamente.
Pese a que trató de huir de su atacante; un inmigrante ilegal de Senegal, no pudo hacerlo pues el sujeto saltó sobre ella y la atacó.
Pensando que iba a ser asaltada, la enfermera le ofreció al sujeto su bolso, pero él la tiró al piso y le tapó la boca con la mano.
“Ponía sus manos en todas partes y se enojaba porque yo me estaba defendiendo”.
Pese a que la enfermera le dijo al sujeto que estaba embarazada y que tenía dificultades para respirar, el agresor no se detuvo.
El sujeto solo se detuvo hasta que el autobús llegó a la terminal y la mujer comenzó a gritar al conductor.
Al lugar llegaron las fuerzas armadas y rodearon al hombre hasta que finalmente también arribó la policía, quien detuvo al agresor.
Con información de The Sun
