“el ladrón silencioso de la visión”
Un porcentaje de la consulta de oftalmología del ISSSTE padece de este mal
CLAVE.- El glaucoma es una enfermedad silenciosa, y no muestra manifestaciones hasta que se encuentra muy avanzada. Las personas con glaucoma empiezan a reducir el campo visual periférico aunque pueden preservar hasta el final la visión central, que en este punto se denomina “visión tubular”. Para evitar llegar a esta condición es fundamental un diagnóstico oportuno y un tratamiento adecuado de la enfermedad.
El glaucoma afecta tanto a hombres como a mujeres y se presenta casi siempre después de los 40 años de edad, la pérdida de visión es progresiva puede tardar muchos años en afectarse la vista y en muchas ocasiones por esta cuestión las personas llegan a la consulta tarde cuando ya tienen una pérdida visual muy severa, en ocasiones se opta por tratamiento quirúrgico; el glaucoma se controla pero no se cura, se detiene y se trata, en la mayoría de los casos un par de gotas al día detiene el proceso degenerativo se conserva la visión el resto de la vida con una simple actividad de detención se puede evitar un problema real como es la ceguera.
El ISSSTE cuenta con todos los recursos necesarios para la atención de pacientes que padecen glaucoma, la recomendación es que a partir de los 40 años de edad tanto hombres como mujeres deben realizarse una revisión ocular para determinar el estado de la visión, esta detección debe incluir toma de presión ocular.
En la consulta de Oftalmología de la Clínica-Hospital de APP Mérida del ISSSTE ubicada en Susulá, de cada 20 pacientes, 3 padecen glaucoma derivada del padecimiento de diabetes, señaló el especialista, Dr. Alfonso Dupinet Sánchez, Cirujano Oftalmólogo en el marco del Día Mundial del Glaucoma.
El médico del ISSSTE, dijo que el glaucoma es una enfermedad que daña el nervio óptico del ojo.
Explicó que el nervio óptico se conecta a la retina que es la capa de tejido sensible a la luz que recubre la parte posterior del ojo, formado por muchas fibras nerviosas. El nervio óptico envía señales desde la retina al cerebro, donde estas señales se interpretan como las imágenes que vemos.
Destacó que la mayoría de las personas afectadas no presentan síntomas en las primeras fases de la enfermedad; más adelante aparecen defectos en el campo visual y pérdida progresiva de visión. La aparición de estos síntomas puede significar que la enfermedad está en un punto avanzado de su evolución.
Refirió que es inusual que exista dolor ocular en el padecimiento de glaucoma crónico, pero es frecuente en el glaucoma agudo (glaucoma de ángulo cerrado), el cual sí puede ocasionar intensos síntomas desde su inicio.
Es importante tener claro que el glaucoma en la mayoría de las ocasiones no produce ningún síntoma, por tal motivo se debe realizar los exámenes periódicos para la detección oportuna de la enfermedad sobre todo a partir de los 40 años de edad cuando menos una vez al año.