CIUDAD DE MÉXICO.
Segurito te lo has preguntado.
Para todos aquellos que han viajado al extranjero, (o si debes hacerlo algún día), se habrán dado cuenta que uno de los grandes problemas, es la necesidad de contar con un adaptador de enchufe para nuestros aparatos eléctricos. En cada país hay enchufes distintos, y puede que no tengas del todo clara la razón.
En total existen 14 diferentes alrededor del mundo, rara vez coinciden con los que utilizas en tu país.
Lo cierto, es que sería más sencillo tener uno universal, sin embargo, por curiosidades de la historia no ocurrió así.
Todo comienza en 1906 cuando se organizó la Comisión Internacional Electrotécnica (IEC por sus siglas en inglés), comienza a organizar a los desarrolladores e inventores para administrar los avances tecnológicos, querían desarrollar estándares mundiales.
Sin embargo, al inicio la gente se conectaba a la energía mediante un tipo de tornillos que colocaban directo en el poste de energía, cuando los aparatos se desarrollaron para casa, las cosas cambiaron.
En las décadas posteriores, los viajes no requerían que la gente llevara sus pertenencias consigo, dígase refrigeradores, televisiones, entre otros aparatos, por lo que cada país ideó su propio enchufe.
La solución era un enchufe incompatible, lo que haría necesario “consumir local”.
Aunque en las décadas posteriores se buscó con ahínco unificar los enchufes, (incluso uno “universal propuesto para mediados de los 80, que sólo fue adoptado por Brasil y Sudáfrica), el daño estaba hecho.
Cada país tenía sus propias entradas y estándares propios. Situación que el USB como método de carga ha solucionado paulatinamente. Información Excelsior.com.mx