Una estudiante estadounidense, recién graduada de high school (lo equivalente a la preparatoria en México), cruzó la frontera para que su padre la viera con la toga de graduación.
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El pasado 24 de mayo, Saraí Ruiz se graduó en la Hector Garcia Early College High School y durante la ceremonia, el director de la escuela pidió un aplauso para todos los padres por el esfuerzo que ese día veían completado.
La joven, de 18 años de edad, solo pudo aplaudirle a su madre. Su padre no estuvo en la ceremonia, porque fue deportado a México hace más de una década. Así que a él le tocó esperar para ver a su hija graduada, al otro lado de la frontera de Estados Unidos, en México.
Me hizo sentir triste, porque veía a los otros papás juntos, a las familias completas, con padres, madres, abuelas. Y para mí solo eran mi madre y una prima, pero no mi papá”, declaró la estudiante a Univision Noticias.
Con su título en mano, Saraí corrió al puerto fronterizo entre Laredo, Texas, y Nuevo Laredo, Tamaulipas, donde su padre ha vivido durante los últimos 10 años.
Al encontrarse, padre e hija se fundieron en un largo abrazo que quedó grabado en un video, que compartió en su perfil de Facebook.
Hice un esfuerzo por no llorar cuando nos pidieron agradecer a nuestros padres, pues sabía que ahí solo estaba mi mamá”, escribió la estudiante en la publicación. “Hoy puedo decir que aunque hayamos perdido tiempo de padre e hija… siempre estaré agradecida por sus sacrificios al poner su vida en riesgo tantas veces solo para verme… gracias papá”, agregó.
El padre de Saraí le dijo que “nadie nunca podrá separarnos, solo Dios nos podrá separar”.
Saraí Ruiz nació en Wisconsin y ahí vivió con sus padres hasta los cuatro años, cuando su padre fue deportado a México.
A tres años de que la familia fue separada, Saraí y su madre se mudaron a Laredo y cada fin de semana cruzaban la frontera para encontrarse con su padre. “Vivíamos los tres en un cuarto chiquitico”.
Así pasaron un año, hasta que la familia logró comprar una casa en México y la rutina se invirtió: de lunes a viernes, la madre y la hija vivían en Nuevo Laredo y cruzaban de madrugada al otro lado para ir al trabajo y la escuela. Así han pasado 10 años.
El día de la graduación, Saraí cruzó la frontera dos veces: Una para ir a ensayar en la escuela por la mañana y otra para el reencuentro con su padre.
El video de esta joven con su padre se viralizó en las redes sociales.
La joven tiene ahora su futuro claro. Fue aceptada para estudiar Psicología y Gobierno enfocado en Economía en la Universidad de Austin, en Texas, y se mudará en otoño. Será la primera de la casa en obtener un título universitario.
Mis papás no pudieron estudiar en Estados Unidos, así que ahora quieren ver ese sueño cumplido en mí”, aseguró. Sabe que su padre tampoco podrá verla el día que le entreguen ese diploma o el de la maestría que espera conseguir.
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