Se descartan dos casos de presunto abuso policíaco
En su primer día de gestión, las autoridades de Umán y Hunucmá se enfrentaron a acusaciones de presuntos abusos de autoridad que terminaron con muertes dentro de sus cárceles.
Luego de los trabajos periciales por parte de la Fiscalía General, se determinó que la causa de las muertes fueron por cuestiones patológicas y que no se encontraron signos de violencia.
En Umán se reportó la muerte de Apolio Dzib, de 33 años de edad, a quien agentes de la Policía Municipal detuvieron por escandalizar en estado de ebriedad.
Alrededor de las 10 de la noche del sábado un agente de la corporación se percató que el hombre, quien solo cumpliría un arresto administrativo, no se movía.
El oficial dio aviso a sus superiores, paramédicos municipales certificaron la muerte y se notificó a la Fiscalía.
Los peritos forenses realizaron las diligencias de ley para el levantamiento del cadáver; la necropsia reveló que la causa de la muerte fue choque séptico secundario a pancreatitis. No se encontraron huellas de violencia.
Pobladores y familiares acusaban que los agentes incurrieron en abuso de autoridad, lo que se descartó.
Casi a la misma hora, pero en la cárcel de Hunucmá, se reportó al fallecimiento de Reyes Paredes Pech, de 65 años. Lo detuvieron por ingerir bebidas alcohólicas en la vía pública.
Oficiales en turno se percataron que el hoy fallecido estaba vomitando sangre y se pidió ayuda a paramédicos.
Al llegar los socorristas solo pudieron determinar que ya había muerto.
Personal de la Fiscalía determinó que el deceso fue cirrosis hepática, los oficiales fueron señalados por abuso de autoridad debido a que se han registrado casos similares donde los policías golpean a los detenidos Información Diario de Yucatán