Las sospechas de infidelidad llevaron a Sabi Ramos, esposa del futbolista peruano Diego Mora, a seguirlo llevándose una decepcionante sorpresa al encontrarlo en un hotel con otra mujer.
Tras el extraño comportamiento del jugador del Colón Santa Fe de Argentina, la amiga de Sabi le sugirió vigilarlo durante un día pero jamás imaginó que sus sospechas eran certeras y fue entonces cuando decidió grabarlo, exhibirlo y armar todo un escándalo mediático.
Sin embargo, la polémica llegó más allá cuando Ramos comenzó a recibir llamadas de un hombre desconocido que intentó intimidarla con amenazas de muerte y hasta arremeter contra su hija.
Pero el colmo del cinismo llegó cuando el futbolista le revelara que su amante se trataba de la hija de un directivo del Deportivo Municipal y que de difundir el video y las grabaciones de amenaza, el poderoso padre de “su querida” podría hacerles daño a ella o a su hija.
Las sospechas de infidelidad llevaron a Sabi Ramos, esposa del futbolista peruano Diego Mora, a seguirlo llevándose una decepcionante sorpresa al encontrarlo en un hotel con otra mujer.
Tras el extraño comportamiento del jugador del Colón Santa Fe de Argentina, la amiga de Sabi le sugirió vigilarlo durante un día pero jamás imaginó que sus sospechas eran certeras y fue entonces cuando decidió grabarlo, exhibirlo y armar todo un escándalo mediático.
Sin embargo, la polémica llegó más allá cuando Ramos comenzó a recibir llamadas de un hombre desconocido que intentó intimidarla con amenazas de muerte y hasta arremeter contra su hija.
Pero el colmo del cinismo llegó cuando el futbolista le revelara que su amante se trataba de la hija de un directivo del Deportivo Municipal y que de difundir el video y las grabaciones de amenaza, el poderoso padre de “su querida” podría hacerles daño a ella o a su hija.