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Llegó la hora de la verdad. Este lunes la Corte habrá de tomar una de las decisiones más importantes del sexenio: enterrar el Plan B de la reforma electoral de Andrés Manuel López Obrador.
El divorcio entre el Gobierno y la Suprema Corte de Justicia de la Nación es definitivo. Pero eso no significa que no pueda empeorar. Lo puede hacer y mucho.
Desde que inició la era de la ministra Norma Piña como presidenta del máximo órgano judicial del país, muchas de las reformas trascendentales de la 4T han sido echadas para abajo.
El mayor revés fue devolverle a la Guardia Nacional un mando civil y revertir su traslado a la Secretaría de la Defensa Nacional. A eso se suma la suspensión del Plan B, que entre otras cosas modifica la estructura administrativa del Instituto Nacional Electoral (INE).
Lejos quedaron los días de amistad y cercanía entre Palacio Nacional y la Corte. Lejos quedaron los días de Arturo Saldívar. De ahí la importancia de poner a una ministra afín al frente del Poder Judicial, aunque fuera un perfil cuestionado como el de Yasmín Esquivel.
La Cuarta Transformación perdió esa batalla. Y por eso el enojo y las campañas agresivas contra Piña.
Este lunes, a propuesta del ministro Pérez Dayán, se analizará el futuro del Plan B. A pesar de los llamados de Presidencia, que infructuosamente pidió posponer la discusión del proyecto, el cual busca echar para atrás la reforma bajo el argumento de que hubo desaseo del legislativo al momento de aprobarla.
El enojo del Poder Ejecutivo ante tal desplante de la Corte, de no querer posponer la discusión, causó que ayer se emitiera un comunicado iracundo hacia los ministros: se les acusó de violar la división de poderes y de querer asumir funciones propias del Congreso.
Es la tercera descalificación que, mediante comunicados de prensa, lanza el Gobierno en contra de las y los ministros en menos de una semana.
En caso de que la Corte sepulte hoy el Plan B… la relación entre ambos poderes se incendiará. Y las escaramuzas pasarán a volverse la guerra. Es decir, más agresiones contra de los jueces, empezando por Norma Piña.
Y ojo, que aún están pendientes las 20 reformas que, de forma fast track, aprobó el Senado el viernes de la semana antepasada. Inforamción Radio Fórmula