A un hombre italiano el deseo sexual lo asaltó de tal manera que utilizó una copa de vino para darse placer.
El sujeto introdujo la copa de 8 cm por 6 cm en el ano, pero al intentar sacarla, ésta se rompió dentro de él, quedando afilados trozos en su interior.
Aunque esto no le causó ningún dolor, tres días después acudió al hospital de Milan, pues se sintió preocupado por su salud.
Afortunadamente el ardiente hombre no sufrió ningún daño y los médicos lograron sacarle el objeto de su interior.
