El acoso callejero es una clara forma de violencia sexual que consiste en comentarios indeseados y hasta tocamientos por parte de desconocidos. Por lo general las víctimas suelen ser mujeres jóvenes.
Pese a que un acto de agresión algunos hombres no lo ven así, pues asumen que no está mal y hasta las culpan por vestirse ‘de forma provocativa’.
Recientemente una chica de 18 años difundió en redes sociales un video en el que se aprecia cómo un hombre se masturba mientras la persigue por la calle, a plena luz del día, en la localidad española de Orihuela (Alicante, al sudeste del país).
Mientras regresaba a su casa tras salir del instituto en el que estudia, la joven se sintió asustada al notar que alguien la perseguía a muy poca distancia. Según su propio relato, a pesar del miedo que sentía, logró grabar al hombre que la perseguía con la cámara de su celular. Al mirar posteriormente las imágenes, ya en su domicilio, se percató de lo que había ocurrido.
La joven decidió compartir el video en Instagram, donde se hizo viral en poco tiempo, y denunció los hechos ante la Policía Local de Orihuela, que tardó pocas horas en identificar al sujeto que aparece en la grabación.
Según ha informado el diario La Vanguardia, se trata de un español de 34 años, casado y empleado como obrero de la construcción, que ya había sido detenido con anterioridad en el 2011, por un delito de exhibicionismo ante menores. Un compañero de trabajo del hombre lo pudo identificar y avisó a las autoridades. Información Excelsior.com.mx
Un varón persigue a chica mientras se masturba detrás de ella en Orihuela. Por suerte, la chica hizo un vídeo y fotos del hombre. Compartid y que todo el mundo le vea la cara.#AlMachoEscracho pic.twitter.com/LBwwxjkt3P— Anna Prats #SomosRadFem (@annaprats) 30 de enero de 2019
Un varón persigue a chica mientras se masturba detrás de ella en Orihuela. Por suerte, la chica hizo un vídeo y fotos del hombre. Compartid y que todo el mundo le vea la cara.#AlMachoEscracho pic.twitter.com/LBwwxjkt3P
— Anna Prats #SomosRadFem (@annaprats) 30 de enero de 2019