CIUDAD DE MÉXICO.
Las autoridades de los centros penitenciarios del país ignoran los incidentes de violencia que ocurren al interior de los penales, dando lugar a un alto índice de suicidios. De acuerdo con el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), entregado a la Cámara de Diputados, el año pasado se registraron 26 decesos por esta causa.
El jueves pasado la Fiscalía General de Justicia del Estado de México confirmó el suicidio de José Octavio “N”, de 43 años, presunto responsable del feminicidio de Valeria, una pequeña de 11 años en Nezahualcóyotl; sin embargo, estos sucesos son recurrentes en los penales del país.
De los suicidios contabilizados por la CNDH, 24 ocurrieron en Centros Preventivos y de Reinserción Social (Ceresos) estatales y dos en Centros Federales de Readaptación Social (Ceferesos).
El informe detalla que los meses en donde se reportaron mayor incidencia fueron enero, abril, junio, agosto y diciembre; el horario en donde con más frecuencia es entre las 06:00 y las 12:00 horas.
El 84% de los casos ocurre en los dormitorios, mientras el 16% restante sucede en áreas diversas como cocinas, comedores, talleres, sitios de visita íntima y familiar.
En relación con estas muertes, las entidades que reportaron más casos fueron: Jalisco con cuatro, Sonora con tres, así como Guanajuato, Nuevo León, Tabasco y Zacatecas con dos cada uno.
De los 131 centros visitados durante 2016 por la CNDH, en 86 de ellos no existen acciones para prevenir, ni atender incidentes violentos, tales como riñas, lesiones, fugas, suicidios, homicidios y motines; de los 42 Ceferesos revisados, en 36 de ellos las autoridades no cuentan con modelos de prevención y atención a los suicidios y homicidios en los penales.
Los homicidios dolosos al interior de los penales, son el tercer incidente de violencia más recurrente en los penales estatales con 85 casos registrados en Centros Preventivos y de Reinserción Social.
Peritaje
De acuerdo con pruebas periciales, José Octavio, presunto asesino de Valeria murió por ahorcamiento, con lesiones coincidentes con la hipótesis de un suicidio.
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México descartó que presentara signos de abuso sexual o lesiones que pusieran en riesgo su vida.
El cuerpo fue encontrado a las cinco de la mañana por un reo con quien compartía la celda; posteriormente, se dio aviso al custodio en turno.
José Octavio fue hallado muerto en su celda con la cabeza inclinada hacia el lado izquierdo, las piernas extendidas y una cuerda en el cuello. Información Excelsior.com.mx