• Este diagnóstico se registra con mayor medida en mujeres mayores de 60 años de edad
Con la finalidad de fortalecer la calidad de vida de pacientes con hipotiroidismo; el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Yucatán otorga algunas recomendaciones básicas ante este padecimiento, el cual se diagnostica cuando la glándula tiroides, ubicada en la parte delantera del cuello, no produce suficientes hormonas tiroideas, es decir, aquellas que ayudan al funcionamiento correcto del organismo; como por ejemplo en la frecuencia cardíaca, control de la energía del cuerpo, peso, digestión y estados de ánimo.
La doctora Rebeca Zetina Muñoz, titular de la Coordinación de Gestión Médica, indicó que sin suficientes hormonas tiroideas, las funciones del cuerpo se vuelven más lentas e inestables; de igual forma pueden generarse complicaciones de colesterol alto, sobrepeso u obesidad, así como caída del cabello.
Alrededor del 80 por ciento del riesgo para desarrollar esta enfermedad es genético, aunque no existe un método para prevenir el hipotiroidismo es recomendable realizarse chequeos médicos preventivos mínimo una vez al año. En el caso de las personas con este diagnóstico no deben suspender sus tratamientos y medicamentos.
En la alimentación los pacientes con hipotiroidismo deben priorizar el consumo de frutos secos como cacahuates o nueces ya que estos son ricos en selenio, el cual ayuda a producir la hormona tiroidea activa. Por otro lado, de ser posible, evitar el consumo de leche, yogurt, salsas o tofu, ya que puede altera el funcionamiento de la tiroides.
También se sugiere que estos pacientes consulten grupos de apoyo, ya que en algunos casos otro de los síntomas derivados de esta afección son los cambios de humor repentinos debido a la alteración que se produce en el sistema nervioso. Así como acompañar con una rutina de actividad física bajo supervisión de un especialista.
En el caso de las mujeres en etapa de gestación, podrían requerir de una mayor aportación de yodo (mineral presente en algunos alimentos como lechuga, papas, etc.), por lo que se recomienda mencionarle a su médico si padece esta condición.
Este diagnóstico se registra con mayor medida en mujeres mayores de 60 años de edad; así como en quienes han tenido problemas anteriores como el bocio (agrandamiento de la glándula tiroides), también en aquellas personas que han recibido radioterapia en la tiroides, cuello o tórax, y que tengan antecedentes, diabetes tipo 1.
El hipotiroidismo puede no causar síntomas notables en las primeras etapas, sin embargo, si no se recibe tratamiento puede llegar a generar numerosos problemas de salud, tales como: obesidad, dolor en las articulaciones, infertilidad o enfermedad cardíaca.
Los síntomas pueden variar según los antecedentes del paciente; sin embargo, por lo general se presenta: fatiga, aumento de peso, problemas para la regulación de la temperatura, estreñimiento, piel seca, disminución de la sudoración, periodos menstruales intensos e irregulares, cambios de ánimo repentinos, depresión, entre otros.
En caso de registrar los síntomas anteriormente señalados o alguna otra complicación se debe acudir a la Unidad de Medicina Familiar para solicitar una valoración médica y con ellos descartar poner en riesgo su salud.