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Se investigan los permisos
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ya investiga el ataque de un tigre de Bengala en un rancho ubicado en la carretera Mérida-Motul, a la altura del municipio de Baca.
Fuentes de la dependencia federal indicaron que un grupo de verificadores acudió al inmueble a recabar información. Se indicó que, en caso de ser positiva la posesión del animal, se solicitaría la documentación respectiva, como los permisos, entre otros papeles.
En caso de que no se tuviera el documento, se aseguraría la especie, se fincarían responsabilidades penales contra el dueño y habría una sanción económica que pudiera ser de más de un millón de pesos.
Hasta el momento la dependencia apenas inicia la investigación y todo lo que se sabe es lo que se dio a conocer en el Diario. “Nosotros tenemos que constatar que la información sea verídica”.
Por su parte, la Fiscalía dio a conocer que hasta el momento no se ha levantado ninguna denuncia y que no pudo tomar conocimiento del hecho porque personal del hospital Star Médica, donde están internados los lesionados, no les permitió el acceso y por ello se desconoce la gravedad de las heridas y cómo fueron los hechos.
La SSP señaló que no atendió el caso porque los heridos fueron trasladados en un vehículo particular e ingresados a un hospital privado.
Trascendió que el dueño del rancho y al parecer del tigre es el empresario regiomontano Roberto Lozano Tamez, exaccionista de un casino y distribuidor de la marca Remuvik en el sureste del país.
La Fiscalía aseguró que no puede actuar sino hasta que se interponga una denuncia por las lesiones, lo que prácticamente no sucedería porque el dueño de los animales y su hijo son los afectados.
La PGR apuntó que podría actuar siempre que la Profepa interponga una denuncia, si se comprueba que los dueños de los felinos no tienen los permisos correspondientes Información Diario de Yucatán
