Federico Azul/ Yucatán al Instante
Kinchil, Yuc., a 6 de abril.- No cabe duda que el tramo de “la mala suerte” de todo puede pasar, tal como experimento el guiador de una camioneta que regresaba con rumbo a Mérida, se le acabó safando una llanta y por poco acaba accidentado la tarde de ayer.
Minutos después de la volcadura del volquete el guiador de una Nissan estaquitas, de conocida empresa de tornillos bajaba del puerto, cuando de la nada, solo sintió que se le desprendió el neumático delantero. Sin embargo conducía a velocidad moderada, por lo que no se desespero en el volante hasta finalizar a la orilla del pavimento, justo a la altura del kilómetro 55, de la citada vía. Ante esto una unidad de la Secretaría de Seguridad Pública se tuvo que quitar del anterior percance, para abanderar a este otro.
Al final el repartidor solicito su grúa particular para el traslado a un taller, puesto que la falla mecánica lo ameritaba.