CIUDAD DE MÉXICO.
El asesinato de Rocío Corvalán causó incertidumbre en Santiago del Estero, provincia de Argentina, el pasado septiembre, pues su pareja sentimental aseguraba que se había tratado de un suicidio.
Al menos así lo hizo parecer.
“La maté porque tenía fotos del amante en su WhatsApp”, confesó entre lágrimas ante la fiscal.
Eduardo Ojeda, quien en septiembre mató a su mujer, detalló que “el 12 de septiembre llegué a casa. Mi mujer dormía en la pieza. Entré y la asfixié. Después, llevé el cuerpo al baño”.
Ayer lunes, llorando, Ojeda confesó a la fiscal Aída Farrán Serlé haber asesinado su pareja en El Mojón, en del departamento Pellegrini, en el noroeste de la provincia de Santiago del Estero.
“Ella me engañaba. Hace años que venía con eso. La perdoné, pero seguía así. Hasta llegó a poner la foto del amante en su de perfil del whatsApp. Se me reía en la cara”, agregó, al intentar justificarse.
“Días antes, ella me arañó en la cara porque le conté a su hermana lo que ella andaba haciendo”.
“Esa noche, volví a casa. Ella esta durmiendo en otra pieza. Yo andaba con ganas de ahorcarme, pero no podía. Cuando la vi, me acerqué y la asfixié con las manos”, agregó.
“Después, para que mis hijos no la vieran, la llevé al baño y le puse una soga en el cuello para que pareciera un suicidio”, ahondó.
PUBLICIDAD
inRead invented by Teads
Al día siguiente, Ojeda quedó preso acusado de “femicidio”. Este martes, el confeso asesino espera en la Capital que la Fiscalía defina su suerte final, según reportó el diario local Filo News. Información Excelsior.com.mx