Progreso.— Dos escándalos se registraron en sendas cantinas de este puerto anteanoche miércoles, protagonizados por meseras que en estado de ebriedad que se liaron a golpes por viejas rencillas y la preferencia de clientes, en su mayoría pescadores que recién llegaron de su último viaje de la temporada de pulpo.
Los pleitos de las meseras ocurrieron casi a la misma hora, cerca de las 10 p.m. Uno de los escándalos fue en el interior del bar “Macaleta”, ubicado en la calle 31 entre 112 y 114, en el poniente de la ciudad, propiedad de Geovanny Gilberto Nal Pech y Roberto Lanz Hernández como encargado.
Agresiones
De acuerdo con los reportes policíacos, en ese local, una de las meseras, de nombre Carolina, de 38 años de edad, quien estaba completamente ebria inició un pleito contra una colega.
Ambas mujeres se agredieron con los cristales rotos de una puerta. Carolina se llevó la peor parte, con lesiones en el abdomen, manos y brazos, entre otras partes, por lo que sangraba profusamente.
Policías municipales que intervinieron tras el reporte llamaron a paramédicos para que atiendan a la mujer.
En el local del bar quedó un charco de sangre por las heridas de Carolina, cuya rival se retiró del lugar antes que llegaran los uniformados. Luego que atendieron a la lesionada, las autoridades procedieron a la clausura de la “Macaleta”.
Espectáculo
Casi a la misma hora, pero a las puertas de la cantina “La Selva”, ubicada en la calle 80 con 29, dos meseras también ebrias se liaron a golpes. Ambas cayeron al suelo y numerosos curiosos y clientes que salieron del bar se arremolinaron en torno a ellas para ver el pleito. Nadie intervino para separarlas.
Uno de los testigos avisó que venía una patrulla policiaca y las dos mujeres se separaron, pero se continuaron insultándose. Una de ellas se retiró con otras meseras también ebrias y la otra se quedó parada en esa esquina, pero se retiró cuando vio venir una unidad de la policía municipal. Información Diario de Yucatán