A través de Facebook, Kaitlin Burge compartió una foto que tomó en enero de su hija, Aubrey, ayudando a su hermano menor, Beckett, quien tiene cáncer.
Beckett fue diagnosticado con leucemia linfoide aguda en abril de 2018, cuando apenas tenía dos años. Desde entonces, ha tenido que recibir tratamientos por quimioterapia y a pasar largas temporadas en el hospital.
La señora Burge, de 28 años de edad, explicó en su publicación las consecuencias de esta vida sobre la relación entre Beckett y su hermana Aubrey, quien le lleva quince meses:
Una cosa que no te dicen sobre el cáncer infantil es que afecta a toda la familia. Siempre escuchas sobre las luchas financieras y médicas, pero ¿con qué frecuencia escuchas sobre las luchas que enfrentan las familias con otros niños? Para algunos, esto puede ser difícil de ver y de leer.
Para su hija, fue extraño y desgarrador ver a su hermanito ser sometido a diversos medicamentos e inyecciones, a verlo todos los días en cuartos de hospital. Beckett pasó de ser un compañero de juego a un niño postrado en cama.
Poco más de un mes después de ser dado de alta del hospital, ella lo vio esforzarse para caminar y esforzarse para jugar. El hermano pequeño animado, enérgico y extrovertido que una vez conoció ahora era un niño tranquilo, enfermo y con mucho sueño. Nunca quería jugar. Ella no entendía cómo podía caminar antes de esto, pero ahora ni siquiera puede moverse sin ayuda. Ella no entendía las diferentes terapias a las que tenía que asistir para recuperar su fuerza.
Aubrey prefiere pasar su día apoyando en todo lo que se pueda a su hermano que salir a jugar con niños de su edad, y esta conducta tiene un poco preocupada a su madre. Luego de vomitar, Aubrey lava las manos de Beckett, lo acompaña de regreso a su cama, y ayuda a sus padres a limpiar el baño.
¿Por qué llevamos a su hermana con nosotros y por qué vio todo esto a una edad temprana? Los niños necesitan apoyo y unión, y no deben mantenerse a distancia de la persona que está enferma. Lo más importante es demostrar que se cuidan independientemente de la situación.
Para la señora Burge, estas son las realidades del cáncer infantil y para sobrevivir esta lucha, las lazos familiares deben ser más fuertes que nunca.
Con información adicional de Daily Mail.