Ciudad de México –
Debutó desde los 14 años en un amistoso con Cruz Azul y pintaba para ser el goleador que el futbol mexicano esperaba. Sin embargo, todo quedó en promesa y Martín Galván perdió brillo hasta terminar en la Segunda División mexicana, aunque hoy busca reiniciar su carrera en España.
El delantero que vivió sus primeros minutos con el primer equipo de la Máquina a fines del 2007 es uno de los cinco jugadores que militan en el Salmantino de la Tercera División española, legión que podría incrementarse pues la directiva también busca a los expumas Jehú Chiapas y David Izazola.
“En México yo ya no disfrutaba del futbol, no encontraba la manera de estar en el mapa. Eso de las oportunidades que tenía en Ascenso pues nada, de hecho nada. Ya no era por mí. Lamentablemente en México es un sistema que se maneja mucho por amistades”, lamentó el delantero en entrevista con Mediotiempo.
La oferta de jugar en el Salamanca vino de parte de un empresario mexicano de nombre Manuel Lovato Pérez, quien en 2015 adquirió el Estadio Helmántico.
Y aunque tiene una “espina clavada” con Cruz Azul, Galván por ahora descarta su regreso a México, en especial después de ganarse el cariño de la gente con un golazo de tiro libre en el clásico ante Unionistas de Salamanca en noviembre pasado.
“En la presentación, donde nos forman a todos, durante el himno del equipo tuve un momento de reflexión y dije: es un sueño cumplido, claro que sí porque estoy en Europa”, relató.
El Salmantino UDS pertenece a la Tercera División, la cuarta categoría en España, detrás de la Liga Santander, la Liga Adelante y la Segunda B. Esta cuarta categoría está compuesta por 360 equipos y el Salmantino juega en el Grupo VIII, donde están ubicados los equipos de la región de Castilla y León.
LOS OTROS MEXICANOS
Además de Galván, los otros mexicanos en el club son Marco Iván Pérez, Saúl Villalobos, Diego Franco y Rodrigo Vera. Pérez jugó para Pachuca, Villalobos debutó con Atlas y Tyson Vera estuvo con Atlético de San Luis en el Ascenso MX, mientras que Franco y Galván surgieron de las fuerzas básicas de Cruz Azul.
Ahí, Galván jugó su primer partido con 14 años en un amistoso en 2007 y al año siguiente de manera oficial, con 15 años y 8 meses, de manera que es el segundo más joven en debutar en juego de Liga, después de Víctor Mañón, quien tenía 15 años y 7 meses.
“Diego (Franco) llegó primero que yo a Salamanca, hablé un poco con él y le pregunté cosas. Se fue haciendo la cadenita, yo nada más conocía a Saúl Villalobos y a Diego. A cada quien lo contactaron y le platicaron del proyecto. Todos vimos que era buena opción y decidimos tomarla”, agregó Galván vía telefónica. Información Medio Tiempo