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La propia Matrix ha ingerido la píldora roja.
Lana Wachowski, una de las creadoras y directoras de esta oda a la ciencia ficción, expandió el concepto de este universo de acción, plomo, elegidos, rebelión y la figura mesiánica de un hombre a un programa de códigos totalmente inclusivo.
Si piensan ver algo similar a lo de la trilogía, durante su estreno este miércoles en salas del país, será mejor que previamente consuman su cápsula roja para estar abiertos a todo lo posible durante Matrix Resurrecciones.
Nos ubicamos en la Matrix, 20 años después de Matrix Revoluciones, Neo vive en su vieja realidad como Thomas Anderson (Keanu Reeves), pero un comando liderado por Bugs (Jessica Henwick), una reencarnación de Morfeo (Yahya Andul-Mateen) y Lexy (Eréndira Ibarra) irrumpen en la producción para mostrarle lo que realmente pasó y ha acontecido a lo largo de su rutina como programador.
Excélsior cuestionó a Eréndira Ibarra, en entrevista, cuán abierto cree que esté el público fanático de Matrix para recibir los giros de la historia.
Lo interesante de Lana es que no está a la expectativa de la gente. Ella dice, ‘ésta es mi historia y si le llega a una o millones, ya veremos’. El éxito es tener la oportunidad de mostrarla en un mundo que está en contra de lo que queremos contar.
Tuvo el vehículo para contar lo más importante de su ser y sanar la pérdida de su papá y su mamá. En ningún momento es panfletaria, es como en Sense 8: hablamos de cosas trascendentales, sin tapujos, metida en un paquete entretenido porque así es la vida. Lana siempre transmite la necesidad de estar bien con una misma”, dijo la actriz, de 36 años.
La producción fue meramente inclusiva: gays, heterosexuales, no binarias, trans, el mundo de hoy
dentro de una película para brindar representación y contar la verdadera raíz de la Matrix, contextualizó la actriz.
Sin soltar spoilers, Trinity (Carrie-Anne Moss) vuelve en la esencia verdadera, cumpliendo el destino que desde el principio le fue atribuido por sus creadoras y la comedia se vuelve parte primordial de la trama. De aquí la filosofía del bienestar y la alegría de Lana, es como lo explica Eréndira.
Se trata de estar bien con ser diferente. Abrazar la diversidad. Repito, no es panfletario, es natural y trascendental, como cualquier conversación”, subrayó.
Erendira entró el mundo cyberpunk en esencia sicológica y física; su personaje Lexy lleva un peinado de trenzas con pasadores plateados que la hacen ver mucho más ruda de lo que ya es. También entró al terreno de la acción y las coreografías, y limpia no salió
No me pude mover un par de días, pero fue normal. El tren fue de los más exigentes por el espacio pequeño, pasaba de todo y además Lana pasaba entre todos con la steady cam. Sin embargo, la más dolorosa fue contra Los Exiliados. Estuvo durísima.
Peleaba siempre con Brian (Berg en la película) y me tocó salir volando contra unas maderas y la caída era hasta abajo y seco. Me quedé sentada 10 minutos. Casi me muero, no podía respirar y Lana sólo me preguntaba ‘¿Estás bien, puedes hacerlo de nuevo?’. Y yo así de, ‘sí jefa, obvio puedo’. Pero me dolía todo”, explicó.
La experiencia con Keanu Reeves estuvo padre. Erendira no recibió un Rolex como los dobles de acción del actor, en John Wick 4, pero tiene sus escenas con el protagonista, sobre todo un diálogo al interior de Ion, la ciudad de la humanidad, y con Sati (Priyanka Chopra).
Hubo un momento donde él se quedó pegado a la fuente y Lana tenía que pasar por enfrente de él, lo agarré del cinturón, lo jalé y me dijo ‘wow, conque así va a ser’”, narró durante la charla virtual.
Matrix Resurrecciones será una de las atracciones para esta temporada de Navidad y fin de año. Información Excelsior.com.mx