La mayoría de los casos de deshidratación que se presentan en los hospitales, y particularmente en el Hospital General de Los Mochis, son en niños menores de dos años de edad por ser los más propensos a los problemas de tipo digestivo, informó Rafael Preciado Romero.
En ese sentido, el jefe de Pediatría del nosocomio reveló que a diario se registran deshidrataciones leves que son tratadas desde el hogar con la ingesta de agua y sueros orales, y es hasta que se presentan de moderadas a graves cuando las personas acuden a atenderse con un especialista.
En lo que va del año, explicó, en el Hospital General se ha registrado solo un caso de deshidratación en un paciente masculino de 60 años.
“Hay grupos de edad que son más vulnerables a la deshidratación que otros, principalmente los lactantes, es decir, aquellos niños menores de dos años de edad tienen más posibilidad de llegar a un grado de deshidratación mucho más severo que uno más adulto; igualmente los adultos mayores”.
Indicó que los primeros dos grados de deshidratación en lactantes se atienden con Vida Suero Oral, mientras que a los niños que llegan en grado 3 o severa se manejan con líquidos intravenosos. Por ello, dijo, es muy importante la supervisión de la madre hacia el bebé.
“Cuando los pacientes llegan en un grado 2 de deshidratación los pasamos a urgencias para supervisar la hidratación de la madre hacia el bebé, porque muchas veces la forma incorrecta de administrar el Vida Suero Oral condiciona a que el niño tenga mayor grado de dificultad”.
Recalcó que de 10 consultas que llegan a urgencias, ocho corresponden tanto a infecciones respiratorias como enfermedades digestivas.
“La deshidratación es una complicación de la diarrea. La mayoría de las veces los papás traen a sus hijos por la diarrea y muchos de ellos ignoran los datos de deshidratación, pero nosotros hacemos el diagnóstico”.
Detectar los síntomas
Por ello, exhortó a los padres de familia a que acudan a un hospital en caso de detectar signos de deshidratación en sus pequeños.
“Hay diferentes síntomas, principalmente los neurológicos. Un niño deshidratado está somnoliento, irritable, llorón, inquieto; se incrementa el estímulo de la sed, por lo tanto están ávidos de tomar líquidos, agua, Vida Suero Oral; los ojos se le hunden y se les ponen opacos; hay llanto sin lágrimas, la saliva en la boca se seca. Pueden respirar de forma más profunda, estar pálidos. Hay otros datos que nosotros buscamos como es el signo del lienzo húmedo, pulso, fontanela y llenado capilar”.
Debido a la promoción que se le ha dado al uso del suero vida oral, los ingresos hospitalarios de niños con deshidratación han disminuido.
“Gracias al suero vida oral, desde que se descubrió y se empezó a implementar en los años 80 y 90, ha disminuido mucho el ingreso de un niño con deshidratación por el uso del suero de las mamás en casa”.
Más casos en verano
El director de Salud Municipal de Ahome, Francisco Espinoza Valverde, destacó que es en temporada de verano cuando se registran más casos de deshidratación por insolación o algún golpe de calor, y también por el aumento de diarreas y vómitos, porque las altas temperaturas provocan que los alimentos se echen a perder más rápidamente.
Explicó que la deshidratación es la pérdida de fluidos, ya sea por falta de ingesta de los mismos, a través de las evacuaciones o una excesiva sudoración. Se puede registrar en todo el año; sin embargo, durante la temporada de verano van en aumento y las causas más frecuentes son las enfermedades gastrointestinales y la exposición al calor.
Asimismo, refirió que existen tres grados de deshidratación: leves, moderadas o graves.
“Se habla de una deshidratación leve cuando se ha perdido un 5 por ciento de los líquidos del cuerpo, la moderada ocurre cuando hay una pérdida del 10 por ciento y la severa cuando llega a haber hasta un 15 por ciento de pérdida”.
Asimismo, detalló que cuando el paciente está consciente y no presenta vómito se hidrata con líquidos y electrolitos, como los sueros orales. Y cuando el paciente no puede ingerir líquidos a causa del vómito o la pérdida de conciencia, se debe canalizar en la vena para administrarle sueros que lo puedan hidratar adecuadamente.
“Los síntomas pueden variar dependiendo de la causa pero la mayoría de las veces son comunes para todos: padecen sed, sequedad de mucosas, disminución de las ganas de orinar, piel seca, náuseas, dolor de cabeza, fatiga, aumento de los latidos cardiacos, aumento de la frecuencia respiratoria. Todo esto va siendo progresivo hasta que puede llegar a haber, incluso, arritmias cardiacas por alteraciones de los líquidos y electrolitos, desmayo, síncope y hasta la muerte”.
Coincidió con el jefe de pediatría del Hospital General de Los Mochis al afirmar que los lactantes y las personas de la tercera edad son los más vulnerables a padecer deshidrataciones.
La Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios de Sinaloa (Coepriss) emitió una serie de recomendaciones a la población para evitar problemas de salud ante las altas temperaturas.
Entre estas se encuentran evitar permanecer por tiempo prolongado bajo los rayos del sol, usar sombreros o sombrillas y mantenerse en lugares frescos, usar ropa ligera y de colores claros, evitar la ingesta de bebidas alcohólicas porque puede favorecer la deshidratación, utilizar bloqueador solar, ponerse sombrero, gorra y proteger los ojos de los rayos UV, mantenerse hidratado con el consumo de agua purificada, permanecer en lugares frescos y protegerse a la sombra, evitar permanecer dentro de un vehículo estacionado bajo los rayos de sol, cuya temperatura se eleva considerablemente.
La autoridad sanitaria recomienda que ante cualquier malestar es importante evitar la automedicación, lo mejor es acudir a la unidad médica más cercana. Información debate.com.mx