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Bateo oportuno, jonrones y pitcheo sumamente efectivo fue la combinación con la que México venció 11-5 a los Estados Unidos, para lograr su primer triunfo en este Clásico Mundial de Beisbol y su tercera victoria al hilo contra los estadunidenses en este torneo.
Del otro lado de la moneda, el pitcheo se confirmó como la cara de México en el torneo al tener una sólida noche que comenzó con tres entradas de una sola carrera del abridor Patrick Sandoval, que fue respaldada por el relevo de tres innings en blanco de Javier Assad, de un inning de una anotación de Joseph Romero. En la octava, César Vargas y Samuel Zazueta permitieron tres carreras. En el último inning Gerardo Reyes se encargó se poner punto final.
El bat de Meneses resultó letal, ya que con un cuadrangular en la primera entrada le dio ventaja de 2-0 a la escuadra tricolor y con su cañonazo de la cuarta tanda selló la ofensiva de cuatro anotaciones con las que el juego se metió al congelador con el 7-1 que se pintó en la pizarra.
Joey selló su espectacular noche yéndose de 5-3 con cinco empujadas y tres anotadas, y además de plasmar en el box score una ventaja sólida, provocó una euforia en las tribunas que cargaron el juego de un solo lado por el resto de la noche.
Después de este resultado, la Selección Mexicana se pone con marca de 1-1 y tiene el destino en sus manos. Primero enfrentará un día de descanso este lunes para después prepararse para buscar su pase a los cuartos de final al enfrentar a Gran Bretaña el martes y a Canadá el miércoles, con lo que cerrará la actividad de la primera ronda.
Así fue el juego
Joey Meneses fue el encargado de comenzar la fiesta cuando le prendió una recta a Nick Martínez que voló hasta las tribunas del jardín izquierdo-central, con lo que puso arriba a México 2-0, ya que ese cañonazo encontró a Randy Arozarena en los senderos.
La novena de Estados Unidos contestó en la siguiente entrada cuando Kyle Tucker se estacionó en la antesala y llegó al plato con hit productor de Tim Anderson, para poner el 2-1 en la pizarra.
En el siguiente turno al bat de México, la defensiva de los locales colaboró para que los mexicanos volvieran a tener dos carreras de ventaja. Nolan Arenado (rola a tercera), Tim Anderson (elevado al central) y Paul Goldschmidt (tiro a primera base) no pudieron quedarse con batazos y tiros que hubieran sido el tercer out y gracias a eso Joey Meneses terminó anotando el 3-1.
Y Meneses volvió a aparecer para hacer más daño. Primero fue un doblete de Randy Arozarena el que llevó a Alek Thomas al plato con el 4-1 y después apareció Meneses con dos en base (Arozarena y Alex Verdugo) para desaparecer de nuevo a Doña Blanca entre los aficionados de las tribunas del jardín izquierdo. Con eso se coronó el rally de cuatro anotaciones que llevó a la novena mexicana a tener una ventaja de 7-1.
La escuadra estadunidense, que fue totalmente borrada después de anotar en el segundo rollo, puso su segunda anotación en la baja del séptimo rollo cuando Will Smith se voló la barda. Pero los mexicanos respondieron inmediatamente con otro rally de cuatro anotaciones, que empezó cuando Arozarena dio doblete con el que Austin Barnes timbró el 8-2, siendo seguido por sencillo productor de dos de Rowdy Téllez y hit de Alan Trejo que mandó a home el 11-2.
Los estadunidenses intentaron armar un gran rally en la octava tanda cuando anotaron tres veces, pero no pudieron hacer más grande el daño, y sufren de esta manera su primer descalabro del evento y se ponen con récord de 1-1. Ahora este lunes enfrentarán a Canadá. Información Medio Tiempo
