Por Chismecito Político
Ricardo Monreal enseñó el músculo… ¿y Morena debe temblar?
El líder de la bancada mayoritaria en el Senado (que ya no es necesariamente morenista) realizó un evento masivo el sábado con la finalidad de buscar la reconciliación de la sociedad mexicana ante la polarización ideológica y política (valga la redundancia) que se padecen hoy en día.
Es cierto que la polarización siempre ha existido en México. La división y diferencia de clases, así como la monstruosa desigualdad, son muestra de que esta sociedad, la mexicana, siempre ha estado escindida, separada, fragmentada.
Sin embargo, la crispación que se vive actualmente en el debate público es algo que no se había visto desde la Revolución Mexicana y, antes de eso, en la época de la Guerra de Reforma.,
Aunque es positivo que se visualicen las injusticias y las desigualdades que aquejan a nuestra nación, también hay que saber leer los tiempos políticos y el sentir ciudadano.
El grueso de la población mexicana quiere vivir y estar en paz. Ergo, quiere mantenerse alejada de cualquier batalla política que complique aún más su vida cotidiana. Que no salga más caro el pan del día con día.
La cumbre monrealista del fin de semana, llevada a cabo en la Arena México, puede parecer positiva de inicio: el mensaje de la reconciliación nacional, donde personas de amplios espectros ideológicos suman fuerzas para apaciguar los ánimos que se viven a lo largo y ancho del territorio nacional es algo a lo que difícilmente alguien se opondría.
Sin embargo, todo lo contrario: es un atisbo del pleito intestino que se avecina en el partido en el poder, donde las diferencias se agrandan cada hora que pasa… y no hay vuelta atrás.
¿Rompimiento inminente en Morena?
Monreal se ha convertido, de facto, en el líder de la oposición en el país. Como prueba: Alito Moreno, dirigente del PRI, señaló en entrevista con Grupo Fórmula que su partido está dispuesto a respaldar una eventual candidatura del zacatecano al Ejecutivo federal. Otro ejemplo: el senador confirmó que no irá a la marcha masiva en apoyo del presidente Andres Manuel López Obrador, a pesar de que inicialmente aseguró que sí acudiría.
La elección presidencial del 2024 no se va a definir en las urnas, sino mediante los arreglos, pleitos, negociaciones y operaciones políticas que se realicen dentro de Morena.
El evento de Monreal sirvió para demostrar algo: el obradorismo está fragmentado, no se aceptarán imposiciones y se viene una larga guerra civil al interior del partido.
Entre los sucesores de AMLO hay quienes encabezan las preferencias ciudadanas, hay quienes encabezan los anhelos partidistas… y hay quienes lideran la estructura territorial del instituto político.
Morena se dirige a una posible autodestrucción. Información Radio Fórmula