TIZIMÍN, Yuc., 30 de junio 2020.- Con la intención de alertar a otros padres de familia, Gabriela Canto, vecina de Tizimín, compartió la experiencia ocurrida con uno de sus hijos, quien tuvo durante semanas un pedazo de nylon obstruyéndole la nariz.
“Les compartiré su historia para que sus hijos y ustedes no pasen por esto porque una pequeña travesura puede ser una tragedia y es caro el chistesito”, señaló Gabriela Canto.
Hace más de 3 semanas, Renán, niño vecino de Tizimín, comenzó a presentar un olor fétido. ”Su hermana le decía lávate la boca porque te apesta y así estuvo como 2 días, hasta que me percaté que el olor no era de la boca sino de la nariz.
“En ese momento lo llevamos al Seguro, ahí nos dijeron que era sinusitis; nos recetaron un antibiótico y lavarle la nariz. Pasaron 15 días y el olor no se quitaba”, escribió la mujer.
“Lo llevamos con otro doctor y nos recetó otro medicamento, pero ustedes saben que las mamás tenemos ese instinto y sabemos que algo está mal. Lo llevamos a hacer unos rayos X y no salió que tenga algo atorado”.
La joven madre de familia agrega que lo llevó a un otorrinolaringólogo en la ciudad de Mérida, quien lo checó y dijo que el niño tenía un absceso de moco y pus adherido a la fosa nasal y que se tenía que sacar. Sin embargo el pequeño no se dejó por miedo.
“Finalmente, tuvieron que sedarlo y se lo sacaron. Era un pedazo de una bolsa de Nylon. Cómo llego ahí, por qué estaba ahí, cómo lo metió, en qué momento, no lo sé, pero fue un mes y medio que mi hijo tenía eso obstruyendo su fosa nasal”, concluyó el relato. Información Megamedia