La tragedia se ha apoderado de Hajja, ciudad ubicada al norte de Yemen, tras el ataque aéreo realizado por la coalición internacional terrorista liderada por Arabia Saudita, que desafortunadamente ha dejado civiles fallecidos.
Fue el caso de un padre de familia, quien perdió la vida ante la mirada de su hijo de aproximadamente ocho años, quien se aferró al cuerpo del hombre y se negaba a aceptar que había muerto.
El pequeño pensaba que su padre estaba dormido y que en cualquier momento despertaría, para irse a casa. Sin embargo, los rescatistas tuvieron que convencerlo durante horas de que su papá ya no se levantaría.
Después de despedirse de su padre, el menor finalmente lo soltó con lágrimas en los ojos, y fue retirado del lugar, con el fin de mantenerlo a salvo.
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