Por: Francisco Garfias
El humor de César Camacho cambió de un momento a otro. “¡Esto ya valió madres!”, soltó el coordinador de la bancada del PRI en la Cámara de Diputados, luego de leer, en su celular, que Morena revisaba su postura y que iba en contra de la instalación de la Mesa Directiva.
El mensaje decía que por instrucciones de AMLO, quien está en Estados Unidos, Morena no aprobaría la integración de la mesa, nos contó un pajarito que atestiguó la escena.
Eso descomponía el escenario que Camacho tenía previsto para que la Cámara de Diputados instalara, en tiempo y forma, ese órgano interno. Los 48 votos de los diputados morenos eran indispensables, aunque no suficientes, para lograr la mayoría calificada requerida —dos tercios de los diputados presentes—. El tablero electrónico en San Lázaro indicaba la presencia de 468 diputados en el salón de sesiones.
De ese total, 257 eran del PRI, PVEM, Nueva Alianza y PES. Votaron a favor del acuerdo que llevaría al yucateco Jorge Carlos Ramírez Marín a la presidencia de la citada Mesa. Los otros 202 del PAN, PRD, MC y Morena. Hubo dos abstenciones.
Al PRI le faltaron 55 votos para la mayoría calificada. No le hubiera alcanzado con los votos de los obradoristas. Pero los priistas contaban con la ausencia de algunos panistas y perredistas que, al ver como se perfilaba el resultado, decidieron votar en contra para no quedar balconeados.
“No hay mayoría calificada. Se desecha el acuerdo de la Junta de Coordinación Política”, dijo la presidente saliente de la Mesa Directiva, la panista Guadalupe Murguía, antes de decretar un receso que se prolongará hasta el próximo jueves.
Murguía no podía levantar la sesión. El artículo 17 de la Ley Orgánica del Congreso establece claramente que la fecha fatal para instalar la nueva Mesa Directiva es el 5 de septiembre. Fue ayer.
Otra vez pararon el reloj parlamentario, como vulgar país bananero, para sacar la vuelta a la Ley Orgánica del Congreso. Seguros estamos que si el jueves no hay acuerdo, lo volverán a parar y así hasta que se logren los consensos.
Fue una jornada intensa, larga, contrastante. Alianzas inéditas, declaraciones sorprendentes, acusaciones graves de supuestos sobornos y el fantasma del #FiscalCarnal, Raúl Cervantes, que gravitaba por todos lados.
Se habló del procurador en la sesión, en reuniones, en ruedas de prensa y hasta en los muros del salón de plenos, donde fueron colgadas pancartas con leyendas como: “No al fiscal Ferrari. Evade impuestos”
Los frentistas PAN, PRD y MC han repetido que basta con que el gobierno y el PRI asuman el compromiso de que se eliminará el pase automático para que apoyen la integración de la Mesa. Del Senado llegó una débil señal de que el tema del fiscal general ya no es prioritario. La dio el mismísimo Emilio Gamboa, pero no fue suficiente para superar el impasse.
Nos llamó la atención el reconocimiento público que Jesús Sesma, coordinador de la bancada del PVEM, hizo en tribuna a su par de Morena, Rocío Nahle. “Hoy la diputada Nahle nos pudo juntar a todos los coordinadores… Ése es el tipo de políticos que debemos tener en todos los grupos parlamentarios, políticos de construcción”, subrayó Sesma.
AMLO dejó pasar la oportunidad de reivindicar las instituciones que alguna vez mandó al diablo. Pudo aparecer como un hombre que ha evolucionado y que también sabe construir.
Su decisión colocó a Morena del mismo lado que los partidos de oposición que, según él, forman parte de “la mafia en el poder”: PAN y PRD.
El tache mayor de la crisis en el Congreso es para diputados y senadores que no han sabido poner por encima de sus intereses personales o de partido, la buena marcha del Congreso . En lugar de preparase para discutir el Paquete Económico 2018, debatir el pase automático o proponer salidas para los dreamers ante la cancelación del DACA, protagonizan un duelo sobre quién es el más corrupto. Peor aún: estimulan la incertidumbre en los momentos en que las negociaciones sobre el tambaleante TLCAN se desarrollan en México.
La declaración del día la hizo el coordinador de la bancada del PAN en San Lázaro, Marko Cortés.
En rueda de prensa conjunta con sus pares del Frente Amplio, Clemente Castañeda, MC, y Jesús Zambrano, PRD, señaló: “Lamento que hayan llegado al extremo de querer comprar voluntades de diputados de los distintos grupos parlamentarios. Hay ofrecimientos concretos económicos, de prebendas y canonjías para tratar de doblar voluntades”.
No soltó nombres, a pesar de la presión de los reporteros.
Se realizó ayer en el Senado la primera sesión del periodo ordinario que se abre. Presidio el mal tratado, por su partido, Ernesto Cordero. No se produjeron incidentes y asistieron 32 de los 38 senadores del PAN.
Por cierto, será el jueves cuando el priista Emilio Gamboa ceda su lugar en la presidencia de la Junta de Coordinación Política, órgano de gobierno en el Senado, a su correligionaria, Ana Lilia Herrera.
Se imagina usted a Margarita Zavala, Ricardo Anaya, Rafael Moreno Valle, Miguel Ángel Mancera, Silvano Aureoles, José Antonio Meade, José Narro, Miguel Osorio Chong, Enrique de la Madrid y Pedro Ferriz sentados codo a codo. Es lo que podría ocurrir si todos asisten a la comida Los 300 que organiza la revista Líderes en el Campo Marte.
Sólo faltaría Aurelio Nuño para completar la lista de los presidenciables. Pero el titular de la SEP anda con el presidente Peña en China. No estaba en el programa, pero lo invitó de última hora. Información Excelsior.com.mx