Si ya te casaste o estás ese proceso, seguro sabes lo complicado y caro que es organizar la celebración.
Escoger el salón, el vestido, los zapatos, la iglesia y la comida, no resulta nada económico. Por esta razón, siempre hay que planearlo con tiempo y apegarse a lo que la cartera da.
Sin embargo, hay personas que tienen expectativas demasiado altas y se aferran a ellas.
Recientemente se dio a conocer la historia de una joven que soñaba con una boda estilo Kardashian y decidió pedirle (exigirle) a sus invitados que le dieran 1500 dólares por persona.
Lo más increíble del caso, es que ella misma fue quien contó el relato en redes sociales.
Primero comenzó diciendo que la boda se había cancelado y culpó a sus conocidos por no apoyarla en su sueño.
Les escribo con tristeza para anunciarles que la boda se canceló. Perdón por avisar con 4 días de anticipación. Les invito a que lean el por qué para que se pongan en mis zapatos”, dijo.
Desde entonces ahorraron para la boda de sus sueños, sin embargo, el dinero no fue suficiente. La celebración deseada costaría un aproximado de 60 mil dólares, ellos sólo tenían 15 mil.
Al ver el panorama, a la mujer se le ocurrió pedirle 1500 dólares a cada amigo y familiar, le exigió a la dama de honor 5 mil por ‘su amistad’ y a sus suegros 3 mil.
Todo lo que pedimos fue una pequeña ayuda de nuestros amigos y familiares. Fuimos CLAROS. Si no podías contribuir, no eras invitado a nuestra exclusiva boda”.
Sólo ocho personas respondieron y enviaron el cheque, lo cual hizo enfurecer a la novia. Incluso la dama de honor desistió por no tener el dinero suficiente y le sugirió que se apegara a lo que tenían.
¡¿Cómo alguien que me ofreció MILES DE MALDITOS DÓLARES me niega el dinero prometido y luego me dice que cambie mi presupuesto?!”
Como último recurso, los novios crearon una página de GoFundMe sólo para recibir 250 dólares, entonces su novio sugirió una boda rápida y sencilla en Las Vegas.
Ese fue el peor error, pues ella se enfureció con el joven y se burló diciendo que jamás se casaría en un lugar de ‘alcohólicos, prostitutas y adictos a las apuestas’.