A 62 años de su muerte, este 15 de abril, el recuerdo de Pedro Infante, quien hizo cantar, reír y llorar con su talento y carisma en sus interpretaciones en la Época de Oro del cine mexicano, causa revuelo luego de que se anunció la producción de una película protagonizada por Omar Chaparro en una plataforma de streaming.
A su regreso, ahora en la pantalla chica en la producción “Caído del Cielo”, Infante Cruz, quien nació el 18 de noviembre de 1917 en Mazatlán, donde se ubica una estatua en su honor en el Malecón del puerto, será interpretado por el actor y comediante Omar Chaparro, aunque solo como un imitador.
La noticia no deja de causar polémica entre los seguidores de Pedro a pesar de que se ha dejado claro que únicamente será su imitador. Incluso allegados a Lupita Infante, hija del “ídolo de Guamúchil”, aseguran que la plataforma carece de derechos para explotar la imagen de su papá.
Fans del tercer hijo de los 15 que tuvo el matrimonio Delfino Infante y Refugio Cruz expresaron desagrado mediante las redes sociales por la elección de Chaparro como intérprete de personajes de charro, hombre de campo, varonil y mujeriego, un galán del que las mujeres soñaban ser sus “chorreadas”, como en “Nosotros los pobres” y “Ustedes los ricos”.
Tras la salida de la primera imagen del actor como Pedro Infante, allegados a la familia del ídolo del cine mexicano aseguraron que el asunto se está viendo en tribunales.
El actor y cantante, quien ganó la aceptación del público por sus cualidades de persona humilde, sencilla y llena de valores y nobles sentimientos no pensaba dedicarse a la actuación.
Sin embargo su vida cambió en 1939 cuando viajó a la Ciudad de México para participar en concursos de canto, de los que en la mayoría lo despidieron porque no lograba dominar los nervios, lo que le impedía lucir sus conocimientos musicales.
Ese mismo año Pedro apareció por primera ocasión en una película: “En un burro, tres baturros”, como extra; de ahí participó en 61 producciones.
En 18 años de carrera Infante Cruz nunca hizo un personaje de villano en el cine, sin embargo, hizo reír y llorar al público con escenas como el enfrentamiento con Jorge Negrete en “Dos tipos de cuidado” o la muerte del “Torito” en “Ustedes los ricos”.
Entre los títulos más destacados que dejó a la cultura fílmica mexicana se encuentran “Nosotros los pobres”, “Ustedes los ricos”, “Pepe El Toro”, “Los tres García”, “Los tres Huastecos”; su última película fue “Escuela de rateros”, de 1956.
Además tiene un récord de haber filmado seis cintas en un solo año, cuando en 1952 protagonizó “Pepe El Toro”, “Ansiedad”, “Dos tipos de cuidado”, “Los hijos de María Morales”, “Un rincón cerca del cielo” y “Ahora soy rico”.
En la Época de Oro del cine mexicano compartió escenarios con estrellas como María Félix, Blanca Estela Pavón, Sara Montiel, Silvia Pinal, Silvia Derbez, así como Jorge Negrete, los hermanos Soler, Joaquín Cordero y Luis Aguilar.
Con su actuación como “Tizoc” (1956) al lado de María Félix, un éxito internacional, ganó un Oso de Plata post mortem, que lo convirtió en el único actor mexicano en ganar este reconocimiento del Festival Internacional de Cine de Berlín, Alemania.
Además de su éxito cinematográfico, Pedro Infante destacó en el ámbito musical en géneros como bolero, ranchero, huapango, vals y hasta corridos.
En su faceta de cantante grabó más de 340 temas entre los que destacan “Amorcito Corazón”, “Cien Años”, “Cartas a Eufemia”, “Yo no fui”, “Qué te ha dado esa mujer” y “Por un amor”.
Apasionado de la aviación acumuló casi tres mil horas de vuelo y fue precisamente un accidente a bordo de una aeronave que pilotaba lo que le costó la vida un 15 de abril de 1957.
La unidad se desplomó en Mérida, Yucatán, poco después de despegar del aeropuerto, cuando había alcanzado unos 20 metros de altura.
A su muerte a los 39 años Pedro Infante se convirtió en leyenda, pues desde entonces su música y películas permanecen en el gusto de la sociedad mexicana.
Actualmente se le rinde homenaje en distintos museos dedicados a su vida y obra, ubicados en Guamúchil, Mazatlán, Cuajimalpa y Campeche.
Año con año, ya sea en el aniversario de su muerte o de su nacimiento, el “ídolo” reúne a número de seguidores de todas las edades frente a su tumba en el Panteón Jardín de la Ciudad de México.
Quienes acuden a su tumba o al sitio en el que murió, en la calle 54 Sur con 87 en Mérida, llevan a cabo celebraciones religiosas, un desayuno tradicional, una carrera atlética y un festival, entre otras actividades, para recordarlo con sus canciones al son del mariachi. Información Excelsior.com.mx