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La Dip. Rosa Adriana Díaz Lizama hizo un llamado a las autoridades federales para que garanticen el servicio de energía eléctrica en la Península de Yucatán, y para que apliquen tarifas justas.
En intervención en el punto de asuntos generales durante la sesión del Congreso, la coordinadora del Grupo Parlamentario del PAN resaltó la advertencia sobre posibles fallos en el servicio de energía eléctrica que hizo en días pasados el Centro Nacional de Control de Energía al declarar en Estado Operativo de Emergencia a la Península de Yucatán, al superar la demanda de energía a la capacidad de generación.
Sin embargo —señaló—, de manera inesperada, el mismo Centro Nacional de Control de Energía aclaró (el martes) que la notificación preventiva por las limitaciones de suministro de gas natural y la posible falta de suministro eléctrico, fue realizada con el propósito de informar de manera transparente a los integrantes de la industria eléctrica, para que en el ámbito de sus competencias se lleven al cabo las medidas operativas necesarias, lo anterior, en el caso poco probable, de que se llegase a declarar un Estado Operativo de Emergencia en el Sistema de la Península de Yucatán, ya que actualmente no existen las condiciones que fundamenten la declaratoria.
Aquí aplica acertadamente la frase que dice: como digo una cosa, digo otra —dijo—. Digo una cosa el lunes, y el martes me retracto porque seguramente llevé un jalón de orejas de algún alto mando federal.
La legisladora panista añadió que la CFE emitió el martes un análisis técnico para informar que el suministro de energía eléctrica estaba garantizado ante la declaración del Estado Operativo de Emergencia en la Península de Yucatán.
La Dip. Díaz Lizama señaló la incertidumbre entre los usuarios derivada del grave desabasto de gas natural, ya que las autoridades federales han pedido estar preparados para eventuales suspensiones del suministro de energía de manera constante durante los próximos meses, y se hablaba de que de agosto a octubre habría mega apagones, como ocurrió en abril pasado en la Península.
Recordó que en lo que va del año, han ocurrido cuando menos tres mega apagones. Por otra parte, dio a conocer que desde diciembre pasado tanto empresarios como la sociedad civil organizada y el propio gobierno, unieron esfuerzos en una lucha para solicitar tarifas justas y servicio de calidad a las autoridades reguladoras de energía, sin que hasta hoy se tenga respuesta.
En Yucatán se paga de 25 a 30 pesos más por kilowat de energía eléctrica que en el Norte del país —informó—. Estamos ante una situación inédita, pero sobre todo preocupante. Nos encontramos con empresas, Pemex y CFE, que prefieren invertir en una refinería, aparentemente inviable, antes que garantizar el abasto de gas natural en la Península para poder generar energía eléctrica y no sufrir los mega apagones de los últimos meses.
Por último, señaló que en el tema de los apagones y las tarifas, no se diferencian colores partidistas, filiaciones ni religiones, porque todos los sufren por igual.
